Pasaron ocho años, pero los tormentos que sigue sufriendo la llevaron a denunciar penalmente a su padrastro por abuso sexual con acceso carnal.

Además, escuchar a sus hermanas menores que estarían sufriendo los mismos ultrajes, también la alentaron a buscar justicia y obtener ayuda psicológica para poder sobrellevar el drama que vivió durante su niñez.
La denuncia fue realizada en la Comisaría Comunitaria 29 de la ciudad de Quimilí, departamento Mariano Moreno, y está interviniendo la Dra. Vanina Aguilera, de la Unidad de Abusos Sexual del Ministerio Público Fiscal de la circunscripción Capital.
La joven, quien actualmente tiene 21 años, expuso que su padrastro le exigía que lo acompañara a cortar leña al monte, donde finalmente la sometía sexualmente. A veces también aprovechaba que su madre salía a realizar compras o algún trámite para violarla en la casa.
En este sentido, la víctima fue amenazada para mantenerla en silencio durante muchos años. No obstante, en febrero pasado, la joven se armó de coraje y le contó todo lo que había sufrido a su madre, quien tras escucharla le manifestó que “hablaría” con su concubino, pero nunca le dijo nada al sospechoso.
Sin embargo, no fue la única víctima. La joven entabló diálogos con sus hermanas menores. Una de las adolescentes de 15 años comenzó a llorar y a contar que ella también sufre abusos sexuales de parte del mismo sospechoso. A su turno, la menor de 13 años sostuvo que las acompañaría a denunciar porque ella también tenía cosas para aportar a la causa.
La joven de 21 años expuso ante los investigadores que, una vez que tomó la decisión de recurrir a la Justicia, enfrentó a su padrastro y le dijo que lo iba a denunciar. El acusado le pidió que tomara sus “hilachas” y se fuera de la casa, tras lo cual intentó golpearla con un palo de escoba, aunque logró huir hasta la vivienda de una amiga.
La fiscal, tras analizar la denuncia, ordenó que se le realizara la Cámara Gesell a las menores de 13 y 15 años.
A través de la entrevista con psicólogas se establecerá fehacientemente si fueron abusadas por el padrastro, revelaron fuentes judiciales.

“¿Ustedes quieren ver preso a su padre?”, les dijo el acusado

Las tres hermanas lloraron juntas en una de las habitaciones de su casa, luego de que se “liberaran” y se contaran entre ellas lo que estaban sufriendo, sin que nadie pudiera ayudarlas ante las amenazas constantes. En esa circunstancia, el padrastro ingresó al dormitorio, luego de que advirtiera que estaban hablando de él. “Ustedes quieren ver preso a su padre?”, les preguntó interrumpiendo la contención emocional entre las hermanas.
Una vez que las tres decidieron trasladarse hasta la Policía para exponer los hechos, salieron de la casa con destino a la comisaría. Sin embargo, la madre salió e hizo volver a los gritos a las dos hijas de 13 y 15 años. “Vengan a dormir porque las voy a pegar”, las amenazó, tras lo cual las menores regresaron y solo la mayor llegó hasta la dependencia policial.

 

Fuente: Nuevo Diario