Faltaban pocos minutos para las tres de la madrugada del martes pasado. Selva Margarita Díaz, de 67 años, descansaba en su domicilio, donde vive sola, ubicada en el paraje La Rivera, a unos 12 kilómetros de Forres y en cercanías de la Ruta Provincial 49.

En esa circunstancia, ruidos extraños la despertaron. Apenas abrió los ojos advirtió las siluetas de dos personas en su dormitorio. Habían ingresado con fines delictivos luego de violentar una ventana.

Los delincuentes la atacaron a golpes de puño para que les dijera dónde estaba el dinero. Seguidamente, utilizaron una tela polar para atar su mano a una silla. No dejaron de maltratarla y de amenazarla de muerte, mientras los sujetos buscaban dinero entre las pertenencias de la jubilada. Los asaltantes le robaron tres mil pesos que tenía en un bolso, donde transporta generalmente sus pertenencias cuando sale. Luego, los delincuentes emprendieron la fuga por el mismo lugar por donde ingresaron, informa Nuevo Diario.

Con mucho esfuerzo y en medio de la desesperación por liberarse, la mujer logró liberarse, aunque sufrió lesiones en la muñeca de la que estaba atada.

Llorando y pidiendo auxilio a los gritos corrió por un camino en dirección a la casa de una familiar que reside en las cercanías. La sobrina de 41 años se despertó en medio de la noche por los gritos y salió hacia el camino, donde encontró a su tía. La jubilada le contó lo sucedido y se alertó al personal de la subcomisaría de Villa Robles y de la Comisaría 46 de Beltrán.

Asimismo, una ambulancia trasladó a la víctima hasta el hospital zonal, donde le practicaron curaciones y lograron estabilidad su estado por la dramática situación que atravesó en manos de los malvivientes y de quedar atada a una silla.

Los investigadores sospechan que los delincuentes son de la zona y tenían conocimiento que la mujer residía sola en la vivienda. La Policía tiene una línea de investigación y trata de identificar a los autores del asalto.