Transitar los barrios de la ciudad se ha vuelto toda una odisea en los últimos tiempos y es que el pésimo estado de las calles y veredas lo hacen imposible.

A la vez, la situación en pleno centro de Monte Quemado es preocupante teniendo en cuenta que en menos de diez días se registraron varios vecinos personas que padecieron accidentes menores producto del mal estado de las calles.

Si usted se dirige a su trabajo y se moviliza en un vehículo, de 4 o 2 dos ruedas, y no cayó y rompió una cubierta en el pavimento es de pura suerte. Si transita por calle Castelli, esquina San Martin, se queda sin tren delantero y en el mejor de los casos tiene que cambiar amortiguadores.  Según los vecinos hace más de 20 días que rompieron el pavimento y no vinieron más los de la Municipalidad. (Ver Foto.)

Un gran ejemplo del deterioro de las calles y veredas es la zona céntrica de la ciudad, que a pesar de poseer un gran flujo de tránsito y peatones durante todo el día, presenta las calles un jardín de baches, zanjas y yuyos las veredas que impiden la correcta circulación de caminantes y conductores. Al extremo que días atrás, una mujer que estacionó una bicicleta encontró una víbora enrollada en los rayos. Sucedió en pleno centro de la ciudad. (Ver nota aparte)

Los hechos son más que contundentes, pues en pocos días se produjeron accidentes por un mismo motivo: la falta de mantenimiento en calles y veredas. La última víctima de esta negligencia fue una mujer joven, embarazada, María Isabel Mansilla, que resultó con heridas en su rodilla, abdomen y raspaduras en el pómulo izquierdo de su rostro, al tropezar con una baldosa rota y caer. Sucedió por calle San Martin, a escasos 50 metros de la municipalidad.

Tanto frentistas como autoridades municipales parecen no tomar conciencia de su responsabilidad ante estos accidentes. Cabe destacar que los daños causados pueden ser denunciados.

El deficiente estado de las calles significa un gran riesgo para todos, los grandes baches, consecuencia de la falta de mantenimiento y un mal asfaltado, provocan a diario situaciones que preocupan a los vecinos. Si bien muchos de esos accidentes no son registrados por personal policial y médico, quedan en el anonimato, pero no por ello son menos importantes, sino que representan un llamado de atención para los responsables de mantener una ciudad limpia, ordenada y segura al tránsito peatonal y vehicular.

Las historias se repiten a diario  las quejas de los vecinos  no son suficientes en una ciudad  abandonada donde las municipalidad acompaña el proceso de destrucción con su ausencia.