Se suman las quejas de los vecinos de los barrios de la ciudad de Monte Quemado por el mal gusto y el fuerte olor que tiene el agua que se les suministra por la red domiciliaria. Desde la planta potabilizadora y en el hospital Regional del Norte Grande, se admite un incremento de personas que concurren a las consultas médicas con patologías, gastroenteritis, aunque no se especifican causas.

Posteo

“Averigüen qué pasa con el agua de la planta potabilizadora que suministran por la red domiciliaria a la población de la ciudad de Monte Quemado, que tiene gusto y olor feo. A mí me hizo dar dolor de estómago”, nos escribió una vecina del barrio Centro y por estos días, las quejas se multiplican por las redes sociales.

“Ayer en el comedor tuvimos que suspender el lavado de las bajillas por el mismo motivo, tenía el agua de la canilla un sabor y un olor que impregnaba los platos. Hace días lo sentimos así”, comentó otra. “Yo sentí feo olor y pensé que era mi tanque y lo mande a limpiar pero nada cambió y abro la canilla por la que viene el agua directamente de la red y llega con el mal olor, por lo que el problema viene directamente de la planta o se contamina en las cañerías de la red. Acotó una tercera.

Testimonio

Raúl, vive en el barrio Porvenir y le atribuyó al agua que consumió del caño a la profusa diarrea y aseguró que un joven gitano vecino si bien estaba enfermo, con diarrea, por tomar el agua del caño.

Raúl comentó al Municipal Web: “Yo siempre consumí el agua del caño que llega en forma directa por la red y esta vez me enfermó con una diarrea que me llevó hasta el hospital donde después de ver a los médicos y de recetarme unas pastillas que me fui a comprar en la farmacia del frente, ya que cruzando la calle está la planta potabilizadora, más que a preguntar, me acerqué a informarles que el agua que recibimos los vecinos del barrio Porvenir, por la red sale con mucho olor y mal gusto  – Aclarando – “En realidad me atendió un empleado que me dijo que me dirigiera a la Municipalidad, para hablar con el intendente Manuel Castillo o con la secretaria de Gobierno Silvia Castillo, agregó. “En realidad me sentía muy débil para subir las escaleras de la pasarela y llegarme hasta la Municipalidad y no fui, pero el agua sigue saliendo del caño con un fuerte olor no digo si tiene mal gusto porque desde que me enfermé ahora todos los días tengo que comprar un agua mineral, y no tengo dudas que es el agua del caño la que me enfermó. Tiene un mal gusto y un fuerte y desagradable olor”, finalizó diciendo Raúl.

Funcionarios indiferentes

A pesar de las consultas de este medio y las reiteradas quejas de los vecinos que denuncian el fuerte olor y el mal gusto del agua, que les llega por la red domiciliaria desde la planta potabilizadora, los funcionarios de la Municipalidad se muestran indiferentes a los reclamos y guardan absoluto silencio, a la vez que en el hospital, las autoridades se limitan a reconocer un notable incremento en la atención de pacientes que se presentan con patologías gastrointestinales, aunque son cuidadosos de ubicar causas de la enfermedad.

Cabe recordar que, el agua para ser potable debe reunir tres propiedades: incolora, inodora e insípida. Si tiene olor y un mal gusto, es lo que denuncian los vecinos: No es potable.