La Justicia dispuso el reintegro de los 35 camiones con 900 tn de soja desde Añatuya, General Taboada, hacia Quimilí, Moreno, donde los camioneros habrían denunciado a intermediarios y contratistas, dentro de una investigación por un frustrado robo de $ 32.000.000.

Ni bien los choferes recuperaron la libertad ayer (28), arrancó la contraofensiva.

Los abogados Vanessa Allalla y Enrique Crespín indicaron que sus defendidos declararon por dos días ante la Fiscalía y que no hubo oposición al requerimiento de libertad, ya que no tenían participación en el robo en el campo La Virginia.

Los transportes habían sido contratados por un intermediario en nombre de un “ingeniero”, (ambos permanecen aprehendidos), y ahora los transportistas realizaron una denuncia contra estas dos personas “L. F. y M.L. más cómplices y encubridores”, por daños y perjuicios.

Manifestaron que fueron engañados en su buena fe, ya que cerraron contrato “porque con ambos habían trabajado por muchos años” y nunca tuvieron inconvenientes. Pero esta situación ocasionó un perjuicio económico importante porque tras la difusión del caso, muchas multinacionales le “bajaron” los contratos de servicios.

Todos los camiones regresaron a Quimilí y depositaron la carga que quedará a disposición de la Justicia que Investiga el hecho, por disposición de la jueza de Control y Garantías, Sara Harón.

El destino será el predio de la Asociación de Cooperativas Argentinas, a la vera de la ruta 92 en Quimilí. Allí, comenzará a descargarse hoy la soja y quedará a resguardo hasta nueva disposición de la Justicia.

Fue indagado ayer un ingeniero, un camionero y un intermediario con residencia en Avellaneda, que realizó las contrataciones de los 35 camiones.

También le fue concedido el arresto domiciliario a un hombre de 54 años, vecino del campo damnificado y es probable que los camiones sean reintegrados hoy a sus choferes.

Fuente: El Liberal