Un trabajador rural de 31 años y su pareja, ambos con domicilio en el paraje Mistol, cercano a la ciudad de Forres, departamento Robles, decidieron irse a pasar un momento de diversión en un baile que se organizó en la cancha Club Los 14, del paraje Quirquitas. En medio del baile, la mujer le reclamó una situación, lo que generó la reacción violenta del sospechoso.

El peón le mordió el labio inferior y la sacó a la fuerza del local. La llevó hasta una zona oscura sin testigos y la agredió físicamente. Le propinó golpes de puño en la cabeza, a la altura de la sien. La víctima, posteriormente, manifestó que los entredichos en la pareja habían comenzado antes de que salieran con destino al baile.

El hecho sucedió el 16 de octubre último. La mujer —que convivía con el sospechoso hace cinco meses— se trasladó hasta la dependencia policial y el sujeto fue aprehendido por orden del Ministerio Público Fiscal.

El viernes, en una audiencia realizada en el Centro Judicial Banda, el juez de Control y Garantías, Dr. José Luis Torrelio, legalizó la aprehensión que pesaba sobre el imputado.

Como la Fiscalía no tenía intención de convertirla en detención, aunque sí que sea liberado con reglas de conducta, el magistrado ordenó la libertad del sospechoso. No obstante, le impuso normas que deberá cumplir, entre ellas la exclusión del hogar. En consecuencia, el imputado se trasladó a la casa materna de Brea Pozo, departamento San Martín, una vez que retiró sus pertenencias del hogar que compartía con su pareja, publica Nuevo Diario.

Asimismo, el magistrado le impuso la prohibición de acercarse a la víctima, a una distancia no menor de 300 metros, y de mantener cualquier tipo de contacto a través de los medios de comunicación, ya sea telefónicos o por redes sociales.