Por Tony  Villavicencio | Los  vecinos de Monte Quemado expresan que la gestión del intendente Felipe Cisneros, a nueve meses de su gestión, para nada contribuye a mejorar la calidad de vida.

Pasó el tiempo y no rectifica rumbo. Es un gobierno que en principio generó crecientes expectativas. Pasa el tiempo, y el pan y circo con el que se entretenía al pueblo romano, en Monte Quemado pareciera haber retornado  de la historia de los pueblos gobernados en el pasado por los emperadores.  

Lo concreto es que las cosas en Monte Quemado están muy mal, hay familias en los barrios y asentamientos. También hay familias campesinas  que no reciben  agua para el consumo humano, porque no tienen  para pagar  el servicio cuando en la municipalidad se invierten sumas importantes de dinero para traer espectáculos deportivos, organizar campeonatos de fútbol, carreras de bicicletas, todo  para mantener  entretenido y distraído al pueblo alejado de sus carencias y sufrimiento.    

Tenemos la experiencia de haber recorrido 30 años las municipalidades y luego las comisiones municipales de la provincia, y en estos primeros meses de gestión vemos que en Campo Gallo, Nueva Esperanza, Quimilí, y otras ciudades vecinas que se enripian calles, se amplían las redes de distribución de agua potable, se modernizan plazas, mejoran el alumbrado público, entre otras obras.

Está comprobado que la escoba nueva siempre barre bien y mejor, pero aquí en Monte Quemado no se observan mejoras. Solo intentaron tapar a medias los baches del pavimento en un trabajo desprolijo y a medias.

El  servicio de recolección de basura, como antes, solo los que viven sobre el pavimento. Lamentablemente, todo sigue igual. Nuestros representantes en el Concejo Deliberante enredados con un concejal  denunciado en la justicia  por un delito que  damnificaría a más de una veintena de jóvenes  imputados y  el cuerpo muestra no tener  la capacidad de corregir, y mucho menos de orientar  el  rumbo de la gestión del Poder Ejecutivo.

El error del comienzo del gobierno de Felipe Cisneros no es fracaso, sino es inexperiencia. Desde su sector  lo disculpan señalando que “recién son nueve meses de gobierno y quieren que construya lo que no se hizo en 37 años”, empero ya es tiempo de comenzar, hay  barrios y asentamientos sin agua potable, sin energía eléctrica, vivimos con graves problemas de inundaciones, con desagües a cielo abierto y el matadero  que contamina y expone la salud de todos los habitantes de la ciudad, y otras necesidades como la del cementerio, se quedó sin espacio para sepultar a nuestros difuntos.

 En la política mal entendida, el opositor disfruta del fanático que en su egocentrismo se niega a reconocer los errores que está en ojos, oídos y el sufrimiento del pueblo. Nueve meses de una gestión es suficiente para mostrar por donde se van a comenzar aplicar las políticas públicas en busca de solucionar los problemas de una ciudad inviable donde faltan y nos apuran servicios básicos y existenciales.