El padre de un paciente asistido en el hospital del Norte Grande de Monte Quemado, escribió una carta en la cual redacta la mala experiencia por la que tuvo que pasar en el nosocomio. Pidió hacerla pública “para evitar que se repitan hechos lamentables”.

El escrito completo:

 No se trata de un accidente de tránsito, ni disparo de armas, ni menos de un herido con arma blanda. Simplemente una desatención del personal de guardia del hospital del Norte Grande de esta ciudad y desde mi humilde conocimiento, paso a contarles para que no ocurra cosas similares con pacientes que ingresan a dicho nosocomio.

El sábado 11 del corriente mes y año, en horas de la noche, ingresa por guardia un familiar muy cercano con problemas de fuertes dolores abdominales, siendo examinada por el médico de guardia, una persona canosa que dispone que se le coloque una inyección y que se retire.

Al no tener mejoría y los dolores ser más fuertes, horas más tardes regresa a la guardia y éste facultativo ordena su internación y, conociendo que días atrás se había hecho realizar una ecografía en la ciudad de Santiago del Estero, dispone la medicación debiendo colocarse suero, por lo tanto tenía que quedar internado, con el correr de los minutos el paciente se queda dormido. Al día siguiente en horas de la mañana, cuando se presenta su esposa para ver su estado de salud lo encuentra en un charco de sangre, la sábana, colchón todo manchado y prendas de vestir que están a la vista, porque lo que digo pruebo con las imágenes al pie del texto.

Con esto no quiero ir en contra de nadie, si de algo sirve para aquellas personas que tienen que internar a un familiar que tengan cuidado, que no ocurra lo que estoy contando. Considero que tanto médico y enfermero de guardia tiene la obligación de controlar al paciente en las distintas salas donde se encuentra internado, cosa que a mí criterio eso no ocurrió, si pasaban más horas corría en riesgo la vida por la gran cantidad de sangre que había perdido.

Si bien nuestras autoridades de gobierno y de salud quisieron solucionar los problemas que siempre el interior viene pasando, esto no creo que sea solución para nadie, cuando el funcionario del hospital no se preocupa, la solución no va a llegar.

Es por ello que pido a quien quiera hacer eco de mi publicación y quiera hacerle llegar a las autoridades que correspondan, para el bien de nuestra sociedad, les estaría muy agradecido, porque es lamentable dejar a un familiar en el hospital y que al día siguiente nos entreguen en un cajón por negligencia, falta de responsabilidad o compromiso.

Señores, cobran un sueldo y a la plata se los gana trabajando, no tomando mate en una sala o acostados, tapados, durmiendo tranquilamente a la horas de su trabajo. La obligación es velar por la salud de esas personas que están al cuidado de ellos, por eso pido que ante casos similares que nos ocurran, no nos callemos, demos a conocer, un día alguien nos va a escuchar y nos va a dar la solución.