El escenario era imponente: las luces, las pantallas, el sonido, y Karina “la Princesita de la Cumbia”, con su humildad y talento se ganó la simpatía de las miles de personas que concurrieron a lo que fue el cierre del cumpleaños de los 100 años de la ciudad de Campo Gallo.

“Y yo sigo cantando” fue la canción apertura, muy representativa en su carrera, ya que la compuso cuando cambió de discográfica. Si bien el público era variado en edades, la cantante se sorprendió ante la creciente multitud que se dio cita en la cabecera del departamento Alberdi, donde tuvo la humildad de saludar a una de sus fanáticas, una niña con capacidades diferentes, con quien cambió el número de sus celulares para estar comunicadas.

El show, muy bien estructurado, contó con diferentes partes, calibrando la emotividad y la vibración. Lamentablemente, después de permanecer y cantar por un espacio de 80 minutos, la lluvia obligó a que la actuación se diera por terminado, ya que el espectáculo se realizaba al aire libre y corrían riesgo los equipos, poniendo también en peligro a los músicos y a la propia artista, quien en el corto y tiempo de su actuación interpretó algunos de los temas clásicos como “Con la misma moneda”, “Corazón mentiroso”, “Sin vergüenza”, “No se toca”, “Te quise olvidar” y “Fuera”, dejando plenamente conforme a las miles de personas que presenciaron el interrumpido show.

No hay dudas que Karina es, después de lo que logró Gilda, la artista femenina más representativa de la cumbia popular. Con este corto show, consolidó su lugar ante el público de la centenaria Campo Gallo.