A menos de una semana de haber jurado como intendente, el obrajero Manuel Osvaldo Castillo, designó a su familia en puestos claves. Cesanteó a más de treinta obreros de planta permanente y contratados y habría amenazas de bajar de categoría a los antiguos trabajadores de la comuna.

Cabe destacar que el gobernante asumido hace menos de una semana oficialmente, negó a información al pueblo acerca de la asunción de los cargos asignados a sus propios hijos, que se instalaron en la municipalidad, habiéndose verificado por los documentos sellados y firmados, para sorpresa de propios y extraños, que las secretarías de Gobierno la ejerce Silvia Castillo; Obras Públicas, “Teté” Castillo y suena el nombre de una nuera para ocupar el cargo de Tesorera, en la más clara y contundente muestra de un gobierno arrimado al nocivo nepotismo (gobierno de familia).

En desacuerdo al decreto firmado por el presidente Macri, la Municipalidad de Monte Quemado es el centro de un abusivo nepotismo, cuando el flamante intendente designa a sus hijos en cargos estratégicos, quienes, al decir de gremialistas, estarían llevando a cabo dentro del municipio una clara depuración ideológica, dejando sin trabajo a más de 30 empleados de planta permanente y contratados, identificados con sectores opositores al gobierno de turno.

Por otra parte, la situación de violencia institucional no sólo se refleja en el ámbito municipal, sino que se traslada al Juzgado de la ciudad de Monte Quemado, donde el personal cesanteado en las últimas horas, presentaría una andanada de Recursos de Amparo, pidiendo a la justicia la restitución de sus puestos de trabajo y la reposición de sus respetivas categorías.

Cabe destacar que, entre el personal cesanteado, se encuentran las cuatro maestras de los jardines de infantes municipales, dos de las cuales prestan ese servicio desde hace más de dos años, y en forma reciente se habían creado dos nuevos jardines, designando el personal las que también fueron cesanteadas, por lo que, a partir de estas nuevas medidas, los jardines municipales permanecen sin docentes y cerrados.

La situación es confusa, no hay información oficial, no existe en la práctica dentro de la municipalidad un organismo de prensa y difusión que le permita a los medios recoger y trasladar información oficial. Se conoce de los despidos por las quejas de los trabajadores perseguidos y las madres preocupadas de los niños que concurren a los jardines de infantes cerrados, por lo que, como en el obraje, todo se discute en la familia del patrón.