Otra vez la empresa Tucumana que exporta limones, conocida por hacinar personas que buscan trabajos eventuales vuelve a estar envuelta en una polémica, esta vez porque no le paga en tiempo y forma a sus jornaleros.

Esta tarde se conoció la triste historia de un joven oriundo de Rivadavia Banda Sur que está trabajando en Metán que de la desesperación y el hambre tomó la terrible decisión de “robar para comer”.

Alrededor de las 15 el joven fue descubierto robando mercaderías al ser descubierto “dijo que tenía hambre”, al escuchar esto María Cristina Mansilla, propietaria del local ubicado en calle Roque Sáenz Peña 134, del barrio San Martín de esa localidad, decidió regalarle los productos y no denunciarlo.

Me dio mucha pena el muchacho que estaba robando porque dijo que tenía hambre. Por eso decidí no denunciarlo. Le regalé el azúcar y la harina y un alfajor y una vecina que trabaja en la Municipalidad también le dio mercadería. Le dijimos que no hiciera nunca más eso”, dijo Mansilla a El Tribuno.

Según consigna este medio, el hijo de la mujer descubrió al trabajador precarizado cuando tenía en sus manos un kilo de azúcar y un kilo de harina.

Luego llamaron a la Policía, rápidamente llegó al lugar personal de la Motorizada que demoró de manera preventiva al joven cosechero.