Al menos siete integrantes de la banda dedicada al tráfico de estupefacientes fueron detenidos, tras una minuciosa y coordinada investigación que comenzó en el año 2020 por parte de Gendarmería Nacional.

Una parte de la organización operaba en Santiago del Estero. Se secuestraron tres armas, siete vehículos, cincuenta y ocho celulares, dinero en efectivo en dólares, euros y pesos chilenos junto a dispositivos electrónicos y documentación de interés.

Efectivos de la Sección de Investigaciones Antidrogas "Santiago del Estero" de Gendarmería Nacional, con conocimiento de Procunar y el Juzgado Federal Nº 1 de Salta, hace cuatro años comenzaron una investigación que arrojó como resultado la identificación y aprehensión de integrantes de una organización criminal que operaba en nuestra provincia que recibía cocaína desde una banda regional con asiento en Salta para distribuir en varias provincias.

En paralelo, los datos patrimoniales y financieros relacionados al clan delictivo, permitieron conocer las propiedades que les pertenecen en la ciudad de Salta capital y Córdoba.

Para los investigadores, los inmuebles como los automotores adquiridos forman parte del esquema de lavado del dinero obtenido del narcotráfico.

En ese contexto, el pasado jueves, por disposición del juez federal salteño Julio Bavio, y a pedido de los fiscales Eduardo Villalba y Diego Iglesias, se realizaron 16 allanamientos coordinados, en las provincias de Córdoba, Salta y Santiago del Estero. En la articulación de las inspecciones participaron además unidades operativas de Gendarmería, la Policía Federal Argentina y la Fuerza Policial Antinarcotráfico de Córdoba. Como resultado se concretó la detención de siete implicados, que fueron puestos a disposición de la Justicia.

Tras el registro de los domicilios, también se secuestraron 7 rodados, 3 armas, 58 teléfonos celulares, 61.182 dólares, 70.000 pesos chilenos, 1.251.000 pesos argentinos, 100 euros junto a documentación de interés a la causa.

El Clan

Los protagonistas de la historia serían los miembros del clan Cala-Alemán, quienes se habrían dedicado a traficar droga a lo largo de las rutas del noroeste argentino, hacia el sur del país, desde hace 15 años.

Emmanuel Gabriel Cala, de 48 años, fue identificado como el patriarca. Fue detenido en los allanamientos, prófugo durante largo tiempo gracias a la identidad falsa que empleaba. Registrado en los rubros de transporte automotor en la Afip, con domicilio en Salta capital, tiene una ficha comercial casi virgen, con apenas una vieja deuda con 8 mil pesos de un banco a su nombre. Melisa Alemán es su histórica pareja, de 42 años Estuvo presa años atrás en un penal federal. Le siguen sus hijos Kevin. Alex y Dalci, que llevan el apellido de la madre. Iris Ibáñez, madre de Melisa, es otra de las imputadas. Hay novios de los hijos, operadores varios. A uno, al que investigadores apodan "El Hacker", detenido en las últimas redadas, lo acusan de haber borrado de forma remota los datos en aparatos de la organización.

Queda, por otra parte, un prófugo por detener.