#Feliz29AñosNuevaEsperanza | Pese a la pandemia por coronavirus, Nueva Esperanza comienza a mostrar un nuevo perfil de ciudad cuyo crecimiento sostenido es alimentado por una microeconomía agroganadera que se instaló en la última década.

Cuenta con un municipio donde nada se improvisa y todo se planifica, proyecta, gestiona, ejecutándose obras de servicios básicos que la modernizan, dinamizan y elevan la calidad de vida de sus habitantes.

A la vez, el intendente Hugo Ramon Guerrero propone y trabaja de cara al futuro, llevando obras de servicios básicos hacia nuevos barrios de una ciudad que no para de crecer en su urbanidad a los que se los satisface con servicios de agua, luz y calles enripiadas.

Pueblo de sufrió pasado

A la hora de las evaluaciones siempre es oportuno recordar el pasado, para evaluar el presente, sin perder de vista el futuro y entonces la corta historia nos devela que la Villa Nueva Esperanza no hace muchos años, fue eso, nada más que una villa aislada que había nacido de un asentamiento en las cercanías del río Horcones y hoy se levanta al pie de la Ruta Provincial N°4 y se llega desde la ciudad Capital por la ruta 176.

La población, para entonces perdida en los confines de un vasto y olvidado territorio provincial, donde antes la gente subsistía hachando lo que había quedado de los montes de reache, que en décadas pasadas fue el saldo que dejó la irracional explotación forestal.

Pero esa historia, de montes y hombres explotados, quedó en esa villa de un tiempo no muy lejano, donde la gente sufría la falta de agua, luz y caminos, tres servicio esenciales, que solo antes les permitían sobrevivir hasta que en los últimos 15 años, se trasformó en realidad y comenzaron las obras de infraestructura que hoy el departamento lo muestran con un potencial agro-ganadero, que les elevó la calidad de vida a los vecinos de una ciudad que no para de crecer.

Testimonios

Al respecto, un septuagenario poblador comentó que “los orígenes de la villa tienen que ver con obrajes y hacheros que se instalaron en ese lugar, hoy todos montes que desaparecieron bajo las cimitarras depredadoras de obrajeros que venían desde Tucumán a explotar los montes y se llevaron la riqueza maderera dejado la pobreza, y nuestras familias se vieron acorraladas por las necesidades durante cinco décadas”.

“Todo eso quedó atrás, en el fondo de la historia, porque en los últimos años, en la provincia de Santiago del Estero de la mano del gobernador Gerardo Zamora se logró visualizar 'el nuevo Santiago', haciendo realidad la construcción de caminos, rutas, obras hídricas y la extensión de la red de electrificación rural y hoy mi pueblo de Nueva Esperanza es una ciudad pujante, con  pavimento, plazas, servicios de redes de agua hacia los barrios y poblaciones rurales;  y el intendente Hugo Ramon Guerrero que no hace diferencia, porque todos los vecinos tenemos el mismo derecho”, puntualizó convencido el hombre.

Hoy observamos a lo largo del departamento, obras de infraestructura básica que promovieron el progreso y el desarrollo del departamento Pellegrini, la pavimentación de las rutas, en este último año la actual gestión de gobierno del intendente Guerrero, en plena actividad. Enripiado y mejorado las calles de los barrios de una  ciudad, limpia, ordenada  y también se atienden los caminos  rurales ,se extendió la electrificación rural, el alumbrado público se construyen viviendas sociales para erradicar los ranchos y salvar  a miles de santiagueños de la enfermedad endémica del Chagas, Nueva Esperanza , pese a la pandemia que frena el mundo ,Crese en forma armónica es decir y comprobar que las obras recientes de la provincia, y también del municipio, están en los ojos del que llega a la ciudad que no para de crecer, elevando la calidad de vida de sus habitantes.

Intendentes

Manuel Néstor Arias, director del Personal de la municipalidad, recordó que “Nueva Esperanza estuvo gobernada por el radical Alberto ‘Beto Cazazola’ y en las elecciones del 2018, con la candidatura de don Hugo Ramón Guerrero, el peronismo recupera la gobernación del municipio de la cabecera del departamento Pellegrini”. Sin ocultar su orgullo, agregó “que en los dos años de gestión se hicieron muchas cosas y se podrían haber alcanzado mayores objetivos, pero esta pandemia nos frenó y para el gobierno la vida está por encima de todas las políticas del Estado municipal”.

Por su parte el secretario de finanzas Sergio Suarez, expresó que “la municipalidad está volcando toda su capacidad de gestión en defenezca de la salud de los vecinos de Nueva Esperanza porque esa es la prioridad del intendente, es cierto se está invirtiendo en algunas obras, pero lo primero es cuidar la salud de los vecinos. Gracias a Dios la municipalidad cumple con el pago de suelos a sus empleados, proveedores, tiene sus finanzas saneadas en un tiempo muy difícil”.

La administración transparente y las obras de servicios alimentan una gestión de gobierno municipal que permite ocuparse en el control y cuidado de la salud de la comunidad.