Preocupado por las movilizaciones y el clima social adverso, generado por las elevadas facturas de electricidad, el gobierno del Dr. Gerador Zamora, anunció una medida paliativa que regiría durante noventa días. Por ahora, la promesa de una tarifa diferencial del 30% se hará realidad.

El gobierno provincial se hizo finalmente eco de la indignación generalizada por las impagables facturas de electricidad que este verano vienen castigando fuertemente a los flacos y bombardeados bolsillos de los santiagueños por una economía nacional que consume el salario del trabador argentino.

Son miles las familias cuyos ingresos, en la provincia con los sueldos más bajos, se ven seriamente afectados por el elevado costo del servicio eléctrico, más aún en épocas de altas temperaturas y, por ende, mayor consumo.

En Monte Quemado, Campo Gallo y Nueva Esperanza se han registrado, principalmente en los sectores de jubilados y pensionados, facturas de Edese con montos a pagar de cifras superiores a los haberes mensuales.

Cabe recordar que, en el mes de agosto pasado, en plena campaña electoral, el gobernador Zamora y el entonces candidato a presidente, Alberto Fernández, firmaron públicamente un acta que sellaba el compromiso de crear, en el caso que el Frente de Todos ganara las elecciones, una “tarifa diferencial por razones geoclimáticas” para Santiago del Estero.

El compromiso no se concretó, pero, para descomprimir la situación, que en las últimas semanas alcanzó ribetes “peligrosos” en virtud de la agitación social reflejada en la calle y en las redes sociales, Zamora anunció una rebaja tarifaria del 30% por el plazo de 3 meses para todos los usuarios residenciales.