La policía de la seccional 22 de Monte Quemado, mediante una cédula de notificación, invocando a la Fiscalía a cargo del Dr. Gabriel Gómez, citó por el término de 30 minutos, a partir de su notificación, a la ciudadana Marcela Maldonado, bajo pena, en caso de incumplimiento, de ser llevada por la fuerza pública.

La inusual citación policial, firmada por el oficial inspector Marcos Palomo, se habría iniciado en base a una presunta denuncia de la flamante secretaria de Gobierno, Silvia Mariela Castillo y en la cedula de notificación, textualmente no especifica causa, ni responsable, con el agravante de que la persona notificada “empleada municipal”, debía presentarse en la Comisaría Seccional 22 en un plazo inferior a los 30 minutos a partir de su notificación, que se concretó a la hora 17.35 del día de ayer.

Según trascendió, la joven empleada, obediente al procedimiento, y no obstante a la intensa lluvia, alrededor de las 18, con sus dos hijos mellizos de un año de edad a cuestas, se constituyó en sede policial, a donde el oficial Palomo la habría interrogado sobre la existencia de los archivos de la municipalidad (decretos y ordenanzas), en un procedimiento que correspondería a un trámite interno de la municipalidad, ya que esa documentación es archivada en mesa de entrada y el Concejo Deliberante respectivamente.

Si esto es así cabe entonces preguntarse, si el procedimiento policial se encuentra enmarcado dentro de las normas previstas por el Código de Procedimiento y qué fines persigue la secretara de Gobierno, Silvia Castillo, promoviendo una denuncia sin no antes consultar a quien es empleada y presta funciones en el municipio y recurre a la policía para evacuar información corriente del municipio.

Sin dudas, el viciado procedimiento policial habría sido interpretado de intimidatorio y un abuso de autoridad, por lo que no se descarta que el insólito hecho se transforme, en el Juzgado del Crimen local, en una denuncia contra los funcionarios actuantes.