Un comerciante de 27 años, domiciliado en el barrio El Triángulo de Quimilí, se dirigió a un taller del barrio Calazanz, donde se entrevistó con el mecánico y le contó que el automóvil Chevrolet Onix, al que le hizo motor nuevo, no había quedado bien y levantaba temperatura.

Tras la conversación sobre las fallas mecánicas, el especialista en reparación de vehículos decidió devolverle el dinero que había abonado para que buscara la solución en otro lugar. 
Seguidamente, el comerciante emprendió el viaje de regreso a su domicilio por la Ruta 116. En esa circunstancia, su automóvil Chevrolet Prisma fue embestido desde atrás por una camioneta gris, provocando daños en la parte trasera y la ventanilla izquierda. En ese momento, advirtió que el rodado era conducido por el hermano del mecánico, a quien reconoció, de acuerdo con la denuncia penal. Tras el impacto, el sospechoso extrajo un arma de fuego —posiblemente un revólver—, con la que le apuntó y se dio a la fuga del lugar a alta velocidad. Posteriormente, luego de analizar la violenta situación con su familia, el comerciante decidió realizar la denuncia. Con este objetivo y acompañado de su hermano, viajaban hacia la dependencia policial en el Chevrolet Onix que había retirado del taller recientemente. Cuando se encontraba estacionado sobre avenida Rivadavia, fue impactado otra vez por el mismo sujeto, generándole daños en el espejo retrovisor izquierdo y en el guardabarros del mismo sector.
El comerciante comprobó nuevamente que era el hermano del mecánico, quien se dio a la fuga raudamente de la zona. 
Acuciado por el doble incidente, se presentó en la Comisaría Comunitaria Nº  29 y realizó la denuncia penal en contra del acusado, quien viviría en el barrio Juan XXIII. En este sentido, el damnificado teme por su integridad física. El hecho fue informado al Ministerio Público Fiscal.