En el departamento Copo hubo un notable el cambio de tiempo que contó con relámpagos, truenos, pero prácticamente sin agua, salvo una leve llovizna que para nada asentó la tierra, ni calmo la sed de los miles de animales que padecen la falta del preciado líquido.
A diferencia de otras regiones de la provincia, en el extenso territorio del departamento, el anuncio de los servicios meteorológicos de lluvias y tormentas llegaron en la madrugada de ayer con el ruido de truenos y relámpagos en seco, porque todo terminó en una amenaza de lluvia, y ayer por la tarde las nubes desaparecieron, vislumbrándose nuevamente en el cielo copeño un sol abrasador, sin que la ansiada “tormenta” dejara una sola gota de agua en las represas, ni asentara la tierra de los caminos.
Cabe recordar que, como lo viene informando El Municipal Web, en esta zona del norte provincial no llueve desde hace cinco meces, por lo que, pese a la estación, aún no se observa en los campos el brote verde de las pasturas, agravado por la falta de agua, lo que coloca en peligro al ganado de pequeños productores, que se quedaron sin reserva de agua en las represas y no cuentan con los medios para asistir con el preciado líquido a sus animales.
Por tal motivo, la municipalidad de Monte Quemado, con ingente esfuerzo de recursos y gastos económicos, trata de satisfacer y evitar la mortandad del ganado de estas familias que crían de manera primitiva la hacienda, que es a su vez la única fuente de ingresos económicos.