“¿Qué está pasando aquí?”, preguntó una mujer a su cuñado a quien sorprendió golpeando a su concubina e intentó interceder, por lo que terminó siendo agredida físicamente. Las mujeres son hermanas.

Eran aproximadamente las 22.30 de anteayer, cuando la denunciante de 28 años estaba descansando en su vivienda del barrio Campo II de la ciudad de Quimilí —departamento Moreno—. En ese momento escuchó que en la vivienda lindante donde vive su hermana junto a su familia, se estaba desarrollando una discusión entre dos personas. Era su hermana y su esposo —cuñado de la denunciante—, quienes mantenían un violento cruce de palabras. 
Posteriormente, la mujer comenzó a escuchar a una de sus sobrinas que desconsoladamente le pedía a su padre que “dejara de golpear a su madre”. Pero aparentemente el sujeto no cesaba con la agresión hacia la víctima. De inmediato, la denunciante se dirigió hacia la casa de su hermana para ir a ver qué estaba pasando. 
Al ingresar a la habitación de su hermana, encontró a su cuñado golpeándola y delante de ellos, a una menor de 8 años intentando mediar. “Papi no le pegues”, le decía la niña mientras lloraba desconsoladamente sin poder auxiliar a su madre de la brutal agresión que le estaba propinando su padre. 
Ante la situación, sin dudarlo, la mujer empujó a su cuñado, para lograr que se alejara de su hermana y dejara de golpearla. Pero su actitud lo enfureció aún más; por lo que el atacante la tomó de los cabellos y luego, comenzó a propinarle golpes de puño en el cuello. La mujer se defendió y enfrentó a su cuñado; por lo que se produjo un forcejeo. 
Tras el incidente, el agresor de inmediato se retiró de la vivienda con rumbo desconocido. Mientras que la damnificada se dirigió a la sede de la Comisaría Comunitaria 29 de Quimilí, por el supuesto delito de lesiones. 
En el caso tomó intervención la Unidad Fiscal de la Circunscripción de Capital, que dispuso que las partes sean notificadas de una prohibición de acercamiento e impedimento de contacto por cualquier vía de comunicación. Además, de que cesara todo acto de violencia entre las partes involucradas. 
Los uniformados realizarán un informe socio-ambiental y un relevamiento vecinal en el domicilio de la pareja para determinar si existieron otros hechos de violencia de género que no fueron denunciados oportunamente por la joven damnificada.