Durante varios años, una pareja mantuvo una relación amorosa, pero con el tiempo el “amor se terminó”. Los motivos: constantes amenazas y golpizas que la mujer sufría.

Ahora, ya separados, el agresor pretende obligarla a cambiar su decisión bajo amenazas de que “viralizará las fotos íntimas”

La víctima es una joven residente en el barrio Aeropuerto de la ciudad de Nueva Esperanza —departamento Pellegrini—. El agresor es un comerciante de la zona. La pareja se habría conocido a través de amigos en común. Habrían mantenido conversaciones previas, hasta que decidieron iniciar una relación amorosa. 

Mantuvieron un noviazgo durante varios años, pero la joven decidió poner fin a la relación recientemente. Los motivos que la llevaron a tomar la determinación fueron diversos hechos de violencia de género de los que fue víctima.  

Apenas le manifestó a su expareja la decisión que “ella no quería continuar con el noviazgo”; este lejos de aceptar su determinación, comenzó a hostigarla. La amenazaba de manera constante, mientras le decía que “iba a cambiar”. Siempre pretendía que la joven cambiara su parecer y retomara la relación. 

Pero, ante la constante negativa de la mujer, decidió amenazarla con viralizar fotografías íntimas que tenía en su celular. Eran imágenes que habrían intercambiado cuando estaban juntos. Además de videos de los encuentros sexuales que mantenían.  

Ante la situación, la damnificada decidió radicar la denuncia. Se presentó en la sede de la Comisaría Comunitaria 32, donde detalló los pormenores del aberrante hecho del que era víctima.  

En tanto se dio intervención a la Unidad Fiscal de Violencia de Género de la circunscripción Capital que solicitó la inmediata detención del sujeto. La orden de captura fue firmada, posteriormente, por la jueza de Control y Garantías de Género, Dra. Cecilia Laportilla.  

El agresor fue interceptado por los uniformados en inmediaciones de su vivienda, en el barrio Aeropuerto de la ciudad de Nueva Esperanza —departamento Pellegrini—. Fue identificado y trasladado a sede policial, donde quedó detenido. El mismo fue imputado del supuesto delito de lesiones calificadas, mientras se inició una investigación judicial por el hostigamiento y amenazas de viralizar imágenes íntimas de la damnificada.

La víctima comenzó a recibir la asistencia psicológica correspondiente, tras el hecho.