Una docente de 38 años, domiciliada en Quimilí, vive momentos de gran angustia y preocupación ante la amenaza que recibió de parte de su expareja, por lo que decidió recurrir a la Justicia para que investigara el hecho y “frenara” cualquier tipo de daño, físico o psicológico, que pudiera ocasionarle.

La denuncia fue realizada en la Oficina de la Mujer y la Familia de la ciudad cabecera del departamento Mariano Moreno, donde la educadora expuso que mantuvo una relación sentimental con un hombre de 48 años, durante ocho meses. Sin embargo, en los últimos tiempos, la mujer se enteró que su concubino la engañaba con otra mujer.
Una vez que corroboró la infidelidad y mientras se encontraba en la escuela, le envió mensajes de texto al hombre, ocasión en la que le dijo que no quería verlo en la casa cuando regresara de trabajar. Asimismo, le dio sus razones y las “pruebas” que tenía. Efectivamente, la docente regresó a su domicilio y comprobó que el hombre no se encontraba. Se había llevado su ropa y otras pertenencias; además de la copia de la llave de la motocicleta que le pertenece a ella. La docente pensó que comenzaba una nueva vida. Sin embargo, su expareja apareció nuevamente en escena. Primero insistió en retomar la relación sentimental, pero ante la negativa, él la amenazó. Le envió un mensaje de texto en el que le advirtió que si no regresaba con él, iba a viralizar las fotos íntimas que se habían sacado juntos. Ante tamaña amenaza, la víctima decidió recurrir a la Justicia. La docente expuso ante los investigadores que se si se difunden las imágenes, no solo le provocará un daño personal, sino también en su puesto laboral, teniendo en cuenta que está al frente de alumnos.
El Ministerio Público Fiscal analiza el caso para tomar medidas procesales, a fin de resguardar a la denunciante de una posible difusión de un momento de su intimidad personal.

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