Habían pasado pocos minutos de las 22 de antenoche y había terminado el primer tiempo entre River Plate e Independiente Santa Fe de Colombia.

La familia Taboada estaba viendo el partido por televisión cuando alguien golpeó la puerta del almacén que tienen en el paraje San Ramón, ubicado a 15 kilómetros de Las Delicias y a 40 de Nueva Esperanza, departamento Pellegrini. Era un hombre, desconocido para Luis Esteban Taboada (70 años), quien lo atendió. El cliente pidió que le vendiera una gaseosa, pero al darse la vuelta para buscar lo solicitado, ingresaron otros dos sujetos al comercio, quienes hicieron ver la real intención de su presencia en el lugar. Amenazaron de muerte al comerciante y lo agredieron.

A empujones lo llevaron hasta el comedor de la casa, donde estaban su esposa de 70 años y su hijo mayor, de 49. Ellos nada podían hacer porque mantenían cautivo y amenazado con armas a Taboada. A los gritos les solicitaron continuamente dinero. Ataron con alambre los pies y las manos del comerciante y su familia, además de colocarles trapos en la boca para que no gritaran ni solicitaran ayuda. Comenzaron a buscar dinero por toda la casa. Desparramaron las pertenencias de las víctimas de cada una de las habitaciones y los muebles de los dueños de casa. Finalmente, mediante agresiones al comerciante, se llevaron 100 mil pesos en efectivo, dos celulares y un sistema de wifi.
La familia quedó atada en el comedor. Felizmente, luego de 20 minutos de esfuerzos, Taboada pudo desatarse y ayudó a su familia. Seguidamente, fue hasta la casa de su madre, ubicada a unos 30 metros, donde le contó lo sucedido a su hermano, quien llamó a la Policía. El violento robo calificado generó la presencia del personal de la Subcomisaría de Las Delicias y de los técnicos de Criminalística de la Departamental 10 de Nueva Esperanza, quienes realizaron las pericias.

Los asaltantes se movilizaban en un automóvil azul “brillante”

De acuerdo con las primeras averiguaciones policiales entre los pobladores de la zona, los tres delincuentes que asaltaron al comerciante y a su familia se movilizaban en un automóvil azul “brillante” que durante la noche lo habían visto movilizarse por los caminos de la zona. No se descarta de un cuarto delincuente que esperaba en el vehículo, mientras se concretaba el robo calificado. El vehículo había huido hacia la Ruta Provincial 176, ubicada a un kilómetro del paraje San Ramón.
Durante la mañana de ayer, en un rastrillaje por las inmediaciones del almacén, encontraron los celulares y el aparato de wifi que le habían sustraído a la familia. Se sospecha que los abandonaron para no ser rastreados por GPS. Por la tonada, no serían de la zona, señala Nuevo Diario.