Una fiesta clandestina movilizó el domingo a la policía de Monte Quemado, departamento Copo. En horas de la noche, vecinos del barrio San Martín denunciaron que decenas de personas se encontraban reunidas en un domicilio ubicado en calle Juan Felipe Ibarra y Antártida Argentina.

Alertado por lo que estaba sucediendo, el fiscal Dr. Gabriel Gómez ordenó el desalojo del lugar donde se llevaba a cabo un cumpleaños con alrededor de 30 personas. El magistrado ordenó la detención de los presentes, por haber incumplido el Art. 205 del Código Penal. Los damnificados fueron trasladados a la comisaría Seccional 22.

¿Complicidad del municipio?                                        

Lo que parecía una fiesta más, como tantas otras que vienen sucediendo en todo el país, terminó con sorpresas. Entre los invitados a la fiesta, se encontraban un oficial de la policía y gente allegada al intendente Manuel Castillo.

A esta altura, con más de 5 meses de cuarentena, todos sabemos que están prohibidos este tipo de encuentros, de hecho en Monte Quemado, en ocasiones, terminaron con la intervención de la justicia. Pero, qué pasó realmente con esta fiesta en particular ¿Quién la autorizó? Trascendidos señalan que fue la secretaria de Gobierno quien dio el “ok” para que pueda desarrollarse. Al menos eso es lo que afirman allegados a la propietaria de la vivienda, situación que llevó a que haya un corto circuito entre la funcionaria y la dueña de la casa.

Mientras tanto, según señalaron a este medio, el oficial de policía pasó a disponibilidad.

Lo cierto que una vez más familiares, amigos, allegados o vecinos del mismo partido político del intendente gozan de ciertos “privilegios”, que en este caso, de no ser por la actuación del fiscal, hubiera quedado en la nada, no nos hubiéramos enterados como ya pasó con otras cosas. Pero lo más preocupantes es que quienes nos tendrían que cuidar o, al menos, establecer medidas preventivas contra el Covid-19 nos exponen a enfermarnos.

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