La indiferencia de la salud pública de provincias vecinas hacia una enfermedad endémica que sin frenos asesina a miles de argentinos pobres, preocupa a los profesionales del laboratorio de Eco epidemiología de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA, a la vez que resaltan el excelente trabajo que realiza el gobierno de Santiago del Estero.

El mal de Chagas es la enfermedad más importante de la Argentina y de América. Pero no muchos lo saben y a otros tantos no les importa. Tal es el desinterés, que se observa en provincias vecinas no hay datos exactos sobre la cantidad de infectados en tanto es justo mencionar que en Santiago del Estero el Gobierno provincial ha creado una  brigada especializada para luchar contra la vinchuca en todo el territorio provincial  y va construyendo y adjudicando  más de veinte mil viviendas sociales  dentro del plan de erradicación de viviendas ranchos.

En tanto algunos especialistas hablan de una Argentina con más de un millón de infectados y otros duplican la cifra, lo cierto y concreto es que en provincias vecinas si hay campañas de lucha contra el insecto vector de la enfermedad, los recursos se acaban en furiosas campañas publicitarias de fuerte contenido proselitista. En tanto en el norte argentino las vinchucas continúan conviviendo, proliferando e infectando a familias de toda la región habitantes de viviendas ranchos de la periferia de los principales centros poblados y zonas rurales, donde no llegan fumigadores y si vinieron una vez, nunca más volvieron.

El centralismo que impera en la estructura de poder, la improvisación y precariedad del sistema sanitaria del país, con recursos de la salud pública mal empleados y la corrupción imperante en algunos estamentos superiores de decisión, pero fundamentalmente el nivel de inconsciencia, serían las principales causas, de que miles de argentinos pobres, viviendo en el tercer milenio, continúen expuestos a contraer enfermedades endémicas propias del siglo pasado.

El Mal de Chagas, como se la conoce en la población a la infección, producido por el parasito vector de la enfermedad, la vinchuca. Insecto al que en países del primer mundo, por su nivel de reproducción, convivencia y modalidad de trasmisión del parasito, asesino, en la jerga científica y médica lo denominan “el SIDA de los pobres. La vinchuca hembra depone cuatro huevos por día. Basta con tener este número en mente para comprender que, si no se hace algo para detenerlas, una vivienda puede en poco tiempo albergar cientos, o incluso miles de estos insectos vectores de la enfermedad.

Este es, resumido en dos párrafos, el drama que enfrentan los pobladores de las zonas de riesgo  Chaco  Salta y Formosa, provincias  donde se interrumpieron las campañas de desinsectación están registrando un aumento de la notificación de casos agudos de la enfermedad.  Según Opino el doctor  Alejandro  Liberti, del laboratorio de Eco epidemiología de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires-. Quien reconoció que el gobierno de Santiago del Estero, en estos últimos  diez años está trabajando, y  ha entablado una dura lucha contra la vinchuca y es la provincia  que más bajos casos de infectados  a registrado en esta última etapa, salvo Santiago del Estero que intensifica la fumigación con equipamiento y brigadas que dependen directamente del Ministerio de Salud y que coordinan en el trabajo con municipalidades. Los nuevos hallazgos en provincias vecinas son preocupantes: después de un descenso durante la década del 2000, al 2.010 con tres o cuatro casos agudos anuales hacia el final del período, en los últimos cinco años las notificaciones del norte argentino están volviendo a aumentar.

Para finalizar el profesional, dijo: “Los avances realizados en el laboratorio, como la decodificación del genoma del Tripanosoma cruzi, anunciado hace unos días, no alcanzan para cambiar esta realidad, estamos muy preocupados también lo han expresado los especialistas de organizaciones no gubernamentales que siguen la evolución del proceso de la enfermedad, en todo América Latina donde colocan a la argentina entre los países, menos eficaces  en la fumigación”.   

En este tiempo todos los organismos de la sanidad, están con sus esfuerzos universalmente puestos en la desigual lucha el Covid-19, pero también es necesario no descuidar y las provincias de Salta, Chaco y Formosa que no lo están haciendo sería necesario reiniciar la lucha contra la vinchuca. Al menos frenar el avance de la endémica e infecto-contagiosa enfermedad, que en algunos pueblos y parajes de la región norte argentino afecta a más del 18%  de la población.

EL Municipal Web: Datos estadísticos  y opiniones reportados de la página oficial “Información de la Salud Dirección de Estadísticas”