El dólar tuvo en 2017 como principal contrincante a las altas tasas fijadas por el Banco Central y perdió la pulseada. Este año, la divisa cedió un 17,1% a 18,95 en casas de cambio y bancos de la city porteña, según el promedio que realizó ámbito.com.
De esta manera, el dólar perdió contra la inflación, que se estima cerrará el año en el 24%, por segundo año consecutivo considerando que en 2017 la relación fue 16,17% contra 40%.
Así el 2017 será recordado como el año en que la autoridad monetaria escogió a las Lebac para frenar la inflación y ofreció tasas de más del 30% en el mercado secundario, lo que desalentó la compra de la moneda norteamericana.
El billete tuvo sólo cuatro momentos en que pudo levantar cabeza: primero fue en mayo cuando -estimulado por un nuevo escándalo político en Brasil a mediados de mes- se disparó 66 centavos (+ 4,2%) a $ 16,40 tras haber permanecido prácticamente anestesiado durante el primer cuatrimestre del año.
En segundo momento se produjo durante las PASO cuando el dólar se ubicó cerca de los $ 18 en medio de una sostenida demanda estimulada por la percepción de que las elecciones primarias no serían una contienda fácil para el oficialismo.
Para evitar una disparada mayor, la autoridad monetaria debió desembolsar más de u$s 1.600 millones en las dos semanas previas al 13 de agosto. Luego, debido a la buena performance de Cambiemos en las urnas, el dólar sufrió una fuerte caída (en la semana posterior, cayó 41 centavos a $ 17,60).
Un tercer momento fue en octubre, cuando el billete trepó 33 centavos y medio a $ 17,95, pese a que las elecciones no parecieron tener un impacto decisivo en la cotización dado que el mercado ya descontaba un resultado similar al de las PASO.
El último capítulo se escribió este diciembre, sobre todo en la segunda quincena, donde por el ruido político entorno a la reforma previsional (que derivó en incidentes violentos adentro del Congreso y en sus alrededores) -a lo que se sumaron luego otros factores- el dólar anotó su récord histórico en los $ 19,46 y terminó el mes con un avance del 7,2%.
Además de la causa legislativa, el billete se disparó porque el BCRA convalidó a mediados del mes una baja de hasta un punto porcentual en las tasas de Lebac de mayor plazo y debido a una mayor demanda estacional, entre otros, lo que estuvo acompañado por una menor oferta de los agroexportadores.
El punto culmine se alcanzó el jueves cuando, por el anuncio de los cambios en el esquema de metas de inflación, el dólar voló 67 centavos y encadenó diez alzas consecutivas. Este viernes, sin embargo, el billete se desinfló 51 centavos.