Por Tony Villavicencio | Por defender a las provincias exigiendo que se cumpla la igualdad de derechos en un país federal, los medios de tiraje nacional respondiendo a los mezquinos intereses de la política que propicia el nocivo centralismo, descargando falsedades.

Hay que recordar que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, dictó un fallo que privilegia a la ciudad de Buenos Aires con un regalo de 86.000 millones de pesos, en lo que es una sentencia ilegal, injusta deliberada, vergonzosa, propia de un centralismo sin límites y en perjuicio de las provincias de una Argentina Republicana y Federal  a la que defiende el mandatario Santiagueño.

Los medios del grupo Clarín, que se convirtieron en voceros de sus amos y dejaron de ser los voceros de los ciudadanos. Su poder está en que militan y operan para el relato de hegemonía política que les conviene; operan sobre la opinión pública blindando a unos y atacando otros a modo de hacer política, inventando grietas, polarizaciones, crisis y fabricando críticas contra quienes se animan a exigir derechos como es el caso del Dr. Zamora que realizó presentaciones y formulo denuncias en  los tribunales.  

Recordemos que el fallo de la Corte en la investigación preventiva desovilla un contubernio, mafioso, del que participarían funcionarios del gobierno  de la Ciudad de Buenos Aires, miembros de la Corte y directivos del grupo Clarín, cuyos medios de comunicación se ocupan de crucificar a nuestro gobernador, por levantar la bandera del federalismo en defensa de los derechos de las provincias y de los santiagueños.     

A partir de su reclamo, los medios nacionales con su poder de lobby e incidencia política y económica están en que trabajan en la producción de visibilidades, percepciones, representaciones y emociones públicas. Claro, en Santiago del Estero, a las torpes críticas de los medios del  grupo Clarín las pasan de largo, todos los santiagueños somos conscientes de que aún falta por hacer,  pero de que vivimos en un nuevo Santiago y que avanza  no lo podemos negar.

Los medios son claves para que los intereses de la política  incidan en la toma de decisión y ahora también participes de los fallos de una Corte de Justicia que se desentendió de  la Constitución y  los cuatro magistrados del más alto Tribunal se entregaron  a los intereses de los juegos clandestinos de la política colocando en peligro la institucionalidad del país.  

Los medios del grupo Clarín, más que informar libremente, son usados tácticamente para perseguir con sus críticas a quienes levantan la voz en contra de un escandaloso y desvergonzado fallo para obligarlos a desistir de su justo reclamo y nuestro gobernador, ante amenazas de ponerlo preso, ya les dijo “venga a buscarme”.

Los medios de comunicación nacionales dejaron de ser intermediarios o la cancha de lo común de la democracia (si es que alguna vez lo fueron), para pasar a jugar la batalla del poder constituir, destituir o instituir. Y esto es así porque los medios perdieron su transparencia de encarnar la libertad de expresión y muchos de ellos se convirtieron en militantes de un modelo de sociedad, y es por eso, más que informar, hacen lobby para sus propios negocios; más que ejercer activamente la libertad de prensa, lo que defienden es la libertad de empresa.

Es que en Argentina y en toda América Latina, los medios de comunicación se han convertido en actores políticos y económicos cruciales de las democracias. Su poder reside en su capacidad para influir en el poder: El poder de los gobiernos, jueces y legisladores; y también inciden en  el poder de decisión de los ciudadanos y si a este avance de poder omnipotente, no le ponemos límites, corremos el riesgo de sufrir las consecuencias de las democracias que hoy sublevan a los pueblos hermanos de  Bolivia y Perú.