Por Tony Villavicencio | La gran mayoría de los vecinos de Monte Quemado han sufrido escases de agua. El acceso equitativo no está garantizado, pero a veces es necesario hacer saber a los funcionarios como hace la gente para sobrevivir sin agua.

Hay que informar que en Monte Quemado, en plena democracia, persisten las desigualdades y esto debería de preocupar al Poder Ejecutivo, Judicial y Legislativo de la provincia. Es una ciudad donde existe la discriminación y persecución política de una administración municipal que transformó a las instituciones del pueblo en un negocio  de familia, e inclusive se olvidan del servicio más elemental y existencial de la gente como lo es el agua.

En Monte Quemado, ciudad de segunda categoría, la gente desde hace unos días se quedó sin tener un servicio de agua potable. Claro, en el acceso al agua, hay mucha gente que de manera cotidiana vive esta difícil situación, y en su mayoría son mujeres a quienes se les asigna la responsabilidad de salir por las calles a buscar con tachos, baldes y hasta con botellas.  

La historia que presentamos cuenta el día a día de las familias.

Aquí el acceso al agua está por debajo de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y nunca nadie se molestó  por resolver un problema de fondo, básico irremplazable  y existencial. 

Sin agua nadie vive.

Hay que recordar que cada persona que precisa debería contar con un mínimo de 50 litros diarios de agua para cubrir sus necesidades básicas, incluyendo agua para beber, limpieza e higiene personal, preparación de alimentos y limpieza del hogar. Si siguiéramos la recomendación de la OMS, la cantidad de agua que actualmente llega por la red a los domicilios no satisface las necesidades mínimas de una familia tipo.  

Como muchos otros derechos, la falta de agua afecta de manera más severa y frecuente a la familia en su hogar donde viven en condiciones de marginación y vulnerabilidad.  Hay barrios en Monte Quemado, como lo es El Vinalar, Aeropuerto y otros asentamientos que no están contenidos dentro de la red domiciliaria de la planta potabilizadora donde  la provisión depende de la voluntad del intendente y de la Secretaria de gobierno.  

 Hay que hacerles saber a los concejales del oficialismo que en estos últimos días 42.000 habitantes de la ciudad de Monte Quemado se encuentran sin la prestación de un servicio existencial.  Al respecto, el bloque de la minoría  pidió una  sección extraordinaria para tratar la desesperante situación hídrica del pueblo. No es que se negaron, sino que ni respondieron a la nota de convocatoria. “No les importa el sufrimiento el pueblo”, expresan.  

¿Por qué contamos las Historias de Agua

La forma que se abasteció el agua en Monte Quemado siempre generó desigualdad. En muchas oportunidades, la gente hizo colas rogando para que les den agua en la Municipalidad. El sufrimiento es parte de la rutina diaria y hay funcionarios que debieran entender  que el agua es esencial para la vida. De ella dependen el aseo, la recreación, la alimentación y la salud de la familia y negarla o condicionarla a los intereses impúdicos de la política es coartar los derechos humanos.

Lo concreto del  gran problema es la falta de mantenimiento de la planta potabilizadora y de los sistemas de distribución de agua, y la falta de inversión para el mantenimiento provoca que al menos el 40% de agua en la ciudad se pierda en fugas, más los efectos del cambio climático, la falta de inversión en el tratamiento de aguas residuales y el crecimiento demográfico de la ciudad de Monte Quemado, la expansión constante de la población que demanda nuevas conexiones  ya que las actuales están resultando insostenibles por la desprolija y mala administración municipal.

Cualquiera que sea tu experiencia, vivir en una situación de escasez de agua es algo que nadie debe sufrir. Lo expresa la ONU, el acceso al agua es un derecho humano y por lo tanto, debe ser garantizado. El Poder Judicial, Legislativo y Ejecutivo provincial y nacional deberían garantizar que las instituciones públicas (Municipalidades y Comisiones Municipales)  no politicen  y prioricen el servicio a las poblaciones.

De acuerdo con investigaciones privadas respaldadas por la organización oficiales,  de continuar esta situación de mezquindad a las inversiones por parte de la municipalidad, la planta  potabilizadora  tiene grandes probabilidades de  enlamar e infectar el sistema de la red domiciliaria, y la actual escasez es apenas el principio de un  grave problema  que podría dejar sin agua a toda la población de Monte Quemado.