En plena pandemia, Empleados del aserradero del intendente de Campo Gallo, José Vittar habrían sido enviados por su patrón a la provincia del Chaco a instalar una balanza y cuando regresaron los intentaron ingresar en forma clandestina.

En efecto, en horas de la mañana del domingo pasado, personal policial del puesto caminero de la ciudad de Pampa de los Guanacos activó el protocolo ya que un camión con destino Campo Gallo, que decía iba a cargar maderas en el aserradero propiedad del jefe comunal, fue demorado debido a que transportaba en forma ilegal a dos personas escondidas en la caja del vehículo de entre las herramientas.

Según constaría en el libro de la guardia policial, ambos polizontes se domiciliaban en la ciudad de Campo Gallo y habrían reconocidos ser empleados del mencionado aserradero del intendente.

Lo que llama la atención y todos se preguntan, inclusive los propios policías que participaron del procedimiento, es cómo estas dos personas intentaron ingresar en forma clandestina desde  Chaco, una provincia donde hay circulación comunitaria de virus y más de 150 fallecidos, y no fueron detenidas.

Cerca del mediodía del pasado domingo, el camión fue autorizado a continuar su marcha con destino a Campo Gallo ya con las fajas correspondientes, el mencionado rodado arribó a la ciudad cabecera del departamento Alberdi en horas de la tarde y las cuatro personas que se conducían en el camión, fueron aislada en el colegio provincial, lugar que funciona como centro de aislamiento preventivo.

Es todo un misterio el accionar de las autoridades del comité de emergencia, encabezado por el propio intendente José Vittar, sobre la activación del protocolo. No brindan informes de la situación, ni mucho menos del número de personas aisladas preventivamente y una ola de rumores circula sobre este caso, al que desde el espacio oficial se lo ocultó a siete llaves.

Pueblo chico infierno grande. De manera masiva comenzaron a circular los rumores por las redes sociales y los vecinos, en sus posteo, piden que se los informe, mientras desde el comité de emergencia reina el silencio, dando lugar a conjeturas e interrogantes.

Todos preguntan por qué la patronal envió a estos dos jóvenes empleados a realizar trabajos en unas de las provincias de mayor circulación del Covid-19, exponiéndolos al contagio y complicando a todo un pueblo que una vez más se enteró a través de este medio.

Qué hubiera pasado si estos jóvenes que viajaban en la caja del camión no hubieran sido advertidos por la profesional policía del puesto caminero de Pampa de los Guanacos.  

Solo unos cuantos de los que rodean a las autoridades campogallenses son sabedores de la realidad, ya que se observó ayer lunes como en sus estados de WhatsApp el jefe de APS del hospital zonal y otros funcionarios municipales, llamaban a prevenirse y respetar las medidas y denunciar a las personas que estén poniendo en riesgo a todos incumpliendo decretos. Hay que reconocerlo nuevamente el buen accionar de las autoridades pampeñas que ponen en alerta y resguardo a toda la comunidad de Campo Gallo.

Lamentablemente una vez más el intendente de Campo Gallo está en el ojo de la tormenta, y seguramente, fiel a su estilo y personalidad política, saldrá a culpar a la oposición y a la prensa de sus desaciertos como ya pasó con el caso del joven que resultó positivo de coronavirus (detectado en Pampa de los Guanacos) y que de haber llegado a Campo Gallo hubieras comprometido la salud de toda la población.

Para tranquilidad de la población este medio digital está en condiciones de informar que son 4 los demorados por la policía de Pampa de los a Guanacos. El pícaro chófer, su acompañante y los obreros del aserradero del intendente Vittar se encuentran cumpliendo el aislamiento en el edificio del colegio provincial de la ciudad de Campo Gallo.