Por José María Cantos, diputado nacional.- Ayer se cumplieron 45 años del fallecimiento del general Juan Domingo Perón, y los justicialistas rememoramos su obra y su ideario que siguen siendo fuente inagotable de consulta, porque el pensamiento y las enseñanzas de los grandes hombres, cuando se los evoca con convicción y voluntad de hacer, nos permiten ser protagonistas, para aportar desde nuestros lugares en la sociedad, todo lo que esté a nuestro alcance para contribuir al bienestar de los argentinos y al desarrollo del país.

Juan Domingo Perón nos sigue convocando para ser constructores de las transformaciones que terminen con las necesidades y las injusticias. Por eso hoy, como siempre, levantamos las banderas que nos legó para llevarlas a la victoria de la justicia social.

Desde la dimensión de su gran legado, Juan Domingo Perón nos sigue convocando para ser constructores de un mañana mejor para la felicidad del pueblo. Por eso hoy, como siempre, levantamos las banderas que nos enseñó a mantener enhiestas, para llevarlas a la victoria de la justicia en todos los órdenes.

En este nuevo aniversario de su desaparición física, los peronistas de siempre, le tributamos nuestra militancia inclaudicable y nuestra voluntad de mantener firmes los principios doctrinarios, para que las ideas justicialistas sigan haciéndose realidades en obras reparadoras y transformadoras que terminen con las necesidades e injusticias que padece el pueblo.