Por Tony Villavicencio.- La  ingeniería electoral, que desde los distintos sectores políticos arman los dirigentes, no tendrá incidencia en la voluntad del pueblo, que esta vez no votará partidos políticos, ideologías ni posicionamientos de dirigentes, sino que se pronunciará a favor o en contra de un modelo económico.

Entendemos que, en todo proceso electoral, hay momentos en los que se rompe el equilibrio y la cuestión económica es y será el determinante para la voluntad popular en Monte QuemadoSantiago del Estero y el país, donde el pueblo irá a las urnas a aprobar o desaprobar los efectos de un plan económico, instrumentado por el gobierno del presidente Mauricio Macri que aspira a ser reelegido, habiendo ayer anunciado que en la fórmula lo acompañará el peronista ambivalente Miguel Ángel Picheto.

Mezcla de ideologías

Se interpreta que esta vez, para nada el electorado analizará las bondades de proyectos que puedan ofrecer las distintas fórmulas presidenciales, que con Picheto y los radicales en el macrismo, no es más que un cóctel de ideologías que se las justifica bajo lo que se conoce concertación, en el afán de achicar la brecha política.   

El pueblo argentino a partir de la realidad económica, no muestra interés de conocer nombres o alternativas que pudieren presentar las distintas fórmulas presidenciales. Sino que con su voto sólo aspira a aprobar o liberarse de las medidas económicas que lo benefician o lo oprimen, y con ese norte económico anticipado, se pronunció masivamente en las provincias, donde eligieron gobernadores, legisladores provinciales, intendentes y concejales, con los sorprendentes guarismos obtenidos por el peronismo que es el sector opositor a Cambiemos

Sin duda los resultados provinciales, marcan una tendencia. En Córdoba, la segunda provincia con el mayor caudal de votos del país, el peronismo obtuvo  54% de los sufragios. En Misiones, sumó el  74%, en San Juan el 60%, y se sumaron Tucumán, Entre Ríos, y otras provincias donde la coalición que sostiene al presidente, perdió, con derrotas que son en lo electoral, humillantes.

Los gobernadores reelegidos y electos, no deben confundirse con que son dueños de la voluntad de esas inmensas mayorías que acompañaron con el voto su elección o reelección, ni mucho menos coquetear con los abultados resultados obtenidos. Sin duda, el alto personaje obtenido, tuvo mucho que ver con una respuesta del electorado de esas provincias a la situación económica.

En realidad no es casualidad sino causalidad, de que en todas estas provincias sepultaron con votos, a quienes participaron de la contienda electoral, bajo el paragua protector del aparato presidencial donde el radicalismo, su principal aliado a la hora de contar los sufragios, se llevó la peor parte y esto deja en claro que, el electorado en estas regiones del país, no eligieron una ideología, un partido, o un proyecto alternativo de gobierno, sino que se pronunciaron masivamente contra el modelo económico de Cambiemos.

Registros Históricos

En las provincias que ya votaron, hubo registros históricos. Es el caso del 54% obtenido por el peronismo en Córdoba, y la sorpresa la dio la intendencia de la capital cordobesa, segunda ciudad del país donde después de tres décadas de haber gobernado el radicalismo, aliado al macrismo, esta vez no alcanzó a obtener ni el 13% de los sufragios y los dos candidatos del partido que fundó Leandro Além, parte de la coalición de Cambiemos, fueron desdoblados en votos por el candidato del peronismo.

En Misiones, Cambiemos fue virtualmente desaparecido por el peronismo, cuando el electorado catapultó a la gobernación al santiagueño Herrera Ahuad a la vez que quitó los cuatro municipios, donde en las elecciones de hace cuatro años había sentado precedentes Cambiemos, y no es casualidad en esta provincia de la tierra colorada que Cambiemos, el sector liderado por el presidente de todos los argentinos, no tendrá en la función pública ningún representante elegido mediante el voto popular.

Coqueteo de dirigentes

Entonces con estos antecedentes, el coqueteo de los dirigentes que hoy se muestran como es el caso de ScharettiUrtubey, Massa, que permanecen  en la incertidumbre política en lo que sería una innecesaria especulación de ingeniería política, estimamos desde El Municipal Web, que sus decisiones de último momento no tendrán mayor incidencia en el resultado de las elecciones del próximo 11 de agosto porque el argentino, concurrirá a las urnas no a elegir un dirigente, no se pronunciará atendiendo las ideologías o los partidos políticos, sino que irá el 27 de octubre del corriente año a votar a favor o en contra de un modelo económico.