La Selección argentina se clasificó a la final de la Copa América de Brasil tras derrotar a Colombia por penales. En los 90 minutos de juego fue empate 1 a 1, pero desde los 12 pasos la Albiceleste fue mejor y se quedó con el boleto a la próxima instancia.

La gran figura fue Dibu Martínez, que atajó tres penales. Este sábado, a partir de las 21, contra el local en el Maracaná.

El encuentro se llevó a cabo en el estadio Mané Garrincha de la ciudad de Brasilia, fue controlado por el árbitro venezolano Jesús Valenzuela, quien fue asistidos por los jueces de línea Carlos López y Jorge Urrego.

Argentina golpeó de arranque, con una muy buena jugada colectiva que remató Lautaro Martínez. Iban apenas seis minutos cuando el delantero recibió una asistencia de Lionel Messi (que había sido habilitado por Giovani Lo Celso) y marcó el primero.

Pero lo que vino luego fue muy raro. Porque Argentina no la pasó bien. Y lejos de aprovechar la diferencia en el marcador, el conjunto nacional se quedó y Colombia fue el que controló el juego.

Así fue todo hasta que los 15 minutos del segundo tiempo, Luis Díaz anotó el empate de Colombia. Recién ahí Argentina reaccionó. Y se dio cuenta de que no podía quedarse, que tenía que ponerse de pie. Las situaciones llegaron y la Selección pudo haber marcado el segundo (una jugada sola, sin arquero, que ni Di María ni Lautaro pudieron resolver) y un palo apagaron esa ilusión.

Hubo, además, una jugada polémica (por un agarrón a Otamendi) que pudo haber terminado en penal.

El Mané Garrincha es un estadio que le trae buenos recuerdos a Argentina, ya que ahí fue donde en el Mundial 2014 logró dejar en el camino a Bélgica, en los cuartos de final. En esta Copa América, además, jugó dos veces en esa misma cancha y ganó las dos: ante Uruguay y Paraguay, ambos por la zona de grupos. Esta vez, en un nuevo desafío, pero ante Colombia y en semifinales, volvió a ganar.