José Rafael Albrecht, vieja gloria de San Lorenzo de Almagro, murió este lunes a los 79 años. El tucumano fue una de las grandes figuras del fútbol argentino en la década del 60.

Surgido en Atlético Tucumán, pasó los mejores años de su carrera en el club de Boedo, desde donde llegó a la Selección Argentina, con la que disputó los Mundiales de Chile 1962 e Inglaterra 1966.

Albrecht estaba internado desde la semana pasada en la terapia intensiva del Hospital Español a partir de complicaciones sufridas por el coronavirus. Uno de sus hijos también había contraído Covid 19 y permanece ingresado. San Lorenzo se estaba haciendo cargo de los costos de la internación.

Albrecht, que defendió la casaca azulgrana entre 1963 y 1970, fue parte de la defensa del campeón invicto del Metropolitano 68. Era uno de los caudillos de ese equipo que pasó a la historia bajo el mote de Los Matadores. Fue además uno de los defensores con mayor cantidad de goles de la historia del fútbol mundial: convirtió 95 tantos en 506 partidos oficiales. Era un excelso ejecutor de penales.

Antes de llegar a San Lorenzo a cambio de 10 millones de pesos -una cifra estratosférica para la época para un defensor- el Tucumano jugó dos años para Estudiantes de La Plata. Terminó su carrera en el fútbol mexicano, donde defendió los colores de León -ganó tres campeonatos- y de Atlas. Su carrera había comenzado en Atlético Tucumán, desde donde rápidamente llamó la atención de los clubes de Buenos Aires.

"Es un astro. Ese es de los que conocen la hora de ir y la hora de quedarse. No necesita ninguna clase de consejo. Sabe todo. Puede jugar aquí y en cualquier parte. Por calidad, personalidad y temperamento", lo definió sin dobleces Tim, el legendario DT brasileño que lo dirigió durante su paso por San Lorenzo.

Albrecht fue atropellado por un tren en 1989 en lo que muchos señalaron como un intento de suicidio. Luego de una prolongadísima recuperación no sólo logro sobrevivir, sino que también pudo volver a caminar.