El equipo "Ferroviario" derrotó al "Granate" por 1 a 0 con un golazo de Cristian “Kily” Vega, a los 11 minutos del segundo tiempo. Luego River doblegó por dos tantos contra cero, a Estudiantes de Caseros, y es el otro finalista de la Copa Argentina que se jugará el próximo 27 de noviembre.

Central Córdoba

El Club Atlético Central Córdoba jugó un partidazo ante Lanús en el estadio Carlos Augusto Mercado Luna, de La Rioja, por las semifinales de la Copa Argentina, ganando el encuentro por 1 a 0, con un auténtico golazo del santiagueño Cristian “Kily” Vega, en el inicio de la segunda parte.

Al minuto de juego, combinaron Lisandro Alzugaray y Facundo Melivilo por izquierda, rechazó corto Muñoz y el rebote le quedó a Jonathan Bay, quien pisando el área sacó un zurdazo alto que obligó a una gran intervención de Rossi, quien manoteó el balón al córner, en la primera de peligro.

Lanús respondió a los cinco minutos con un remate de Vera, desde el borde del área, que salió desviado.

Después de un arranque feroz, los dos comenzaron a cuidar sus fuerzas por el intenso calor reinante. Se alternaron el dominio, aunque Lanús tuvo más posesión y Central fue más directo o al menos intentaba serlo.

En ese marco, Lanús fue más incisivo, con algunos remates de media distancia y una peligrosa entrada de Bernabei por izquierda, que estuvo a punto de quedar cara a cara con el “ruso” Rodríguez.

A los 24, nuevamente por la izquierda, Bay llegó al fondo, envió un centro que fue capitalizado por Gervasio Núñez, quien remató de zurda, bajo el golero Rossi, dio un rebote corto y Herrera no pudo de cabeza anotar el primero. Casi, casi.

En el final de la etapa, nuevamente presionó Central Córdoba y lo tuvo con un remeta de media distancia Ismael Quilez.

A los 9 minutos del segundo tiempo, centro de Quilez que superó a todos y por detrás apareció Marcelo Meli, quien remató por sobre el horizontal.

Y dos minutos después, Cristrian Vega sacó una bomba desde unos 35 metros y la clavó en un ángulo de Agustín Rossi. Golazo.

A partir de ese tanto, Central se paró para contraatacar y Lanús, obligado, golpeado y necesitado, buscó por todos lados. Zubeldía mandó a la cancha a De la Vega por Bernabei: Coleoni mandó a Galeano por Quilez. Y luego a Cristaldo por Melivilo (lesionado).

Precisamente, el recién ingresado Cristaldo exigió a Rossi con un remate bajo y esquinado. Central intentó meter el partido en el “freezer”, tratando de dormir la pelota, en tanto que el “granate” insistía por todos lados, pero no tenía claridad. Buscó mucho con pelotazos al área. Tuvo un par de cabezazos, pero no inquietaron al “Ruso”, ya que los atrapó sin inconvenientes.

Por eso, Central hizo historia y se metió en la final de la Copa Argentina, porque fue el mejor y porque hizo un golazo que quedará grabado en la memoria de todos los hinchas “ferroviarios”.