Las graves denuncias penales que pesan e investiga la fiscalía de la ciudad de Monte Quemado sobre la persona del oficial principal Gustavo Ariel Sosa, concubino de la secretaria de Gobierno, sería la principal causa de la resolución de su traslado.

La medida fue ordenada por Jefatura de Policía a la cual una vez más el poder político local intenta frenar. 

El policía que presta servicio en la comisaria comunitaria 22 de la cabecera del departamento Copo, valiéndose de su familiaridad con el gobierno municipal encabezado por el intendente Manuel Osvaldo Castillo y su hija la secretaria de gobierno Silvia Castillo, integraba por fuera de los mandos naturales de la fuerza una estructura poli-politica, (policías y Municipales) grupo que se convirtió en el terror de la comunidad, con abusos y arbitrariedades en perjuicio de vecinos de la ciudad.

Los hechos, en algunos casos fueron denunciados, en la fiscalía por allanamientos a viviendas y secuestros de elementos sin orden judicial, procedimientos que se caracterizaron por la violencia habiendo resultado personas golpeadas que luego promovieron las acciones correspondientes por las lesiones, abusos y arbitrariedades.  

Es el caso entre otros de un adolescente de la localidad de El Caburé y la denuncia más reciente, la hija de un empleado municipal, a la que por reclamar trabajo a su suegro el intendente Castillo. Según la denuncia el oficial Sosa la privó de su libertad, la trasladó a la comisaria, estuvo sin comida y sin agua comprometiendo seriamente un embarazo de alto riesgo. Según luego lo confirmó el medico de policía.

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Con respecto a este cuestionado policía, empleados municipales recuerdan y denunciaron públicamente, que Sosa les enviaba a los empleados cédulas de notificación, sello policial con términos de horas e intimación de ser privados de su libertad en caso de no concurrir, sin causa justificada. En lo que estimaron fue un claro abuso de autoridad. Hecho que trascendió por denuncias públicas.   

El Oficial Sosa como parte y jefe del grupo poli-político es señalado por la comunidad de Monte Quemado como “eje” ejecutor de las arbitrariedades, que incluyen no solo procedimientos violentos, sino fabricación de causas relacionadas al incumplimiento de las restricciones a personas identificadas con el sector político opositor al de su suegro.

Asimismo, hay integrantes de la fuerza policial molestos que expresaron que el accionar represivo del grupo Poli-Político estuvo dirigido claramente a hostigar al sector político opositor con las restricciones del protocolo del Covid-19, y otorgar privilegios para la familia gobernante y amigos del poder político encabezado por su suegro.

Cabe destacar que al  conocerse el traslado del oficial principal Gustavo Ariel Sosa hacia la comisaria de la localidad de Tintina fue muy bien recibido por sus colegas, ya que señalaron que en Monte Quemado se despolitizará la fuerza, contribuyendo a recuperar la confianza de la población en la  institución policial. 

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