Hoy en Monte Quemado y todo el país ingresamos a la cuarentena. Tenemos la gran ventaja respecto de otras epidemias del pasado, de contar con una interconectividad a través de internet y telefonía celular que nos protege en caso de aislamiento.

Es importante permanecer conectados a través de redes sociales. Los vínculos, aunque sean virtuales, son el gran amortiguador del estrés y es de pueblos inteligentes el utilizar  todos los medios y los recursos humanos capacitados para hacer frente a la pandemia. 

Las desgracias del hombre con poder provienen de no hablar claro y dejarse dominar por adulones que consiguen lugares sin estar formados ni capacitados. Es el grave problema  donde los hombres de la política que conducen  los pueblos,  privilegian al correligionario o al compañero, bloqueando a los más formados y capacitados.

Es por eso que el  éxito o el fracaso de un  intendente, con una ciudad en situación de emergencia, depende de la colaboración de su entorno. Si la adulación del obsecuente es más fuerte que la profesionalidad, la formación y la capacitación, el fracaso va estar más cerca que el éxito.

 Los obsecuentes, por temor a ser desplazados de los espacios que  ocupan, se disfrazan de sabios de lo que en realidad no están preparados y la ignorancia que los supera se transforma, desde los espacio del poder, en la más peligrosa peste de la emergencia sanitaria.

 Aunque al diario Municipal, LV11 y Nuevo Diario nos nieguen y nos descalifiquen, consideramos necesario y  oportuno aportar a la emergencia desde  el conocimiento y la experiencia, el manejo cuidadoso de la palabra, en el mensaje  para evitar que se apodere el pánico  de la sociedad Copeña,  sometida al rigor de una emergencia sanitaria plagada de falencias, que no vamos atribuir a la mal intención, sino a la inocente y más pura ignorancia.  

 La Peste=Contagio

Hay palabras que asustan. Hay informaciones que crean pánico. Frente a la actual pandemia del Coronavirus (COVID-19), que con la mejor intención pero con ignorancia se la trasmite al vecino por los altos parlantes, generando  incertidumbre, miedo y desorientación; desde el diario Municipal Web queremos llevar algunas reflexiones tranquilizadoras:

Pandemia=Contagio

  1. La palabra PANDEMIA no refiere a la gravedad de una enfermedad sino al alcance de su propagación geográfica, hemos visto en el título de  un diario oficial, la utilización de la palabra  fuera de contexto, infundiendo miedo en el marco de una  información de contención como es la creación de un comité de emergencia.
  2. En un mundo híper conectado y con sobredosis de información, los mensajes pueden ser confusos y tienden a generar angustia e incertidumbre. Es preciso hacer caso omiso de las informaciones no chequeadas  y seguir solo las recomendaciones de los organismos científicos y oficiales. En un espacio de emergencia, la palabra de una presidenta del Consejo Deliberante es palabra oficial… ¿A caso, la señora Zulma Diaz, no lo sabía como para mandarse tamaño furcio, con la falsa información de 20 sospechosos de coronavirus en Monte Quemado?
  3. Las noticias que generan pánico llevan a conductas compulsivas innecesarias y peligrosas en términos sociales, como el aprovisionamiento de medicamentos y alimentos no perecederos que provocan la idea de un escenario de catástrofe y conducen al desabastecimiento.
  4. Recordar que el virus es peligroso solo para una pequeña parte de la población de riesgo con enfermedades preexistentes.
  5. Una cuarentena es un proceso de aislamiento muy breve (14 días) y transitorio que forma parte de un plan de prevención.
  6. Las epidemias y las pandemias terminan en un lapso de tiempo determinado, se auto limitan. Es importante tenerlo en cuenta para combatir la idea de finales apocalípticos y enfatizar la transitoriedad de la situación.
  7. Los cambios sociales que llevan a suspender eventos, a cancelar viajes o a tomar distancia física en el contacto con los otros son medidas de prevención pasajeras.
  8. El miedo paraliza, el caos confunde, la incertidumbre provoca ansiedad y angustia, la información calma, la solidaridad tranquiliza.
  9. Tenemos la gran ventaja respecto de otras epidemias del pasado, de contar con una interconectividad a través de Internet y telefonía celular que nos protege en caso de aislamiento. Es importante permanecer conectados a través de redes sociales. Los vínculos, aunque sean virtuales son el gran amortiguador del estrés.
  10. En monte Quemado hay profesionales, hay gente capacitada,  que desde los espacios de poder los  desestiman y hasta los descalifican, es por eso que el peor virus es el de la ignorancia.