En conjunto con el departamento Bromatológico y el apoyo del cuerpo de infantería, se controlaron en la Capital 5 bocas de expendio, cuyo resultado arrojó el decomiso directo de aproximadamente 270 kilos de uno de los comercios inspeccionados, correspondiendo la misma no solo proveniente de faena clandestina, sino que también parte de la misma correspondía a carne de caballo, procesada en subproductos (picada, hamburguesas, milanesas, etc).

Como es habitual el producto decomisado tuvo como destino el consumo animal a través de las entidades correspondientes.

Estos operativos son posibles gracias a la participación directa de la población, que denuncia estos hechos ilícitos que atentan contra la salud pública.