Sin ocultar el temor que les inspira la secretaria de Gobierno, Silvia Castillo y la jefa de personal, Victoria Pérez e imponiendo la condición de reservar sus nombres, los trabajadores municipales de la ciudad de Monte Quemado, hablaron y dieron a conocer la actual situación de las distintas áreas de la comuna que administra el intendente Manuel Osvaldo Castillo.

Cabe aclarar que el diario digital El Municipal Web, para evitar que los trabajadores sufran persecuciones, entrevistó en forma discreta a empleados de las distintas dependencias de la municipalidad los que denunciaron en algunas de las áreas, que trabajan en condiciones deplorables y en todos los casos el personal entrevistado con temor pide mejores condiciones laborales y el cese de persecuciones políticas.

Persecución

En la oportunidad, todos los entrevistados manifestaron sentirse desprotegidos con derechos laborales vulnerados y sujetos a los intereses políticos, y hasta personales de la familia gobernante.

Otros mirando hacia todos lados y sin ocultar el miedo, dicen que desde la Secretaría de Gobierno, se la usa a la jefa de personal que ha demostrado no tener límites, a la hora de aplicar injustas sanciones a las que se notifican fuera de reglamento y sujetas a su propia voluntad.

En la oportunidad citaron como ejemplo la sanción más reciente aplicada a los empleados de carpintería Gómez, aduciendo que no estuvo en su lugar de trabajo cuando se fue a buscar un baño, porque en el taller no hay. O el caso del empleado Cisneros, a quien lo suspendieron por tres días sin goce de sueldo por llamarlo “viejo” en las redes sociales, al concejal Fecha, a quien le une una vieja amistad.

Otros municipales entrevistados expresaron: “La sensación nuestra es de abandono, cuando el bloque mayoritario del Concejo Deliberante las veces que por intermedio del gremio de ATE acudimos para pedir por nuestros derechos, los concejales oficialistas que son mayoría en el cuerpo incumpliendo reglamentos y leyes con su voto, muestran una peligrosa connivencia con el poder ejecutivo municipal sin hacerse eco ni corregir a los abusos del poder ejecutivo, desoyendo derechos laborales que ya están consagrados en beneficio del trabajador municipal”.

A la vez que explicaron que “reclamar en forma personal o por intermedio del gremio que respeten nuestros derechos, nos expone a sufrir individualmente represalias y es el caso de los empleados que reclamaron la provisión de la ropa, o la escandalosa sanción que sufrió la empleada Roxana Villalba, quién fue castigada por haber agradecido por las redes sociales al ex intendente Carlos Hazán. Hoy  esta misma empleada que cumplía servicio en la Dirección de Tránsito fue confinada a prestar servicio en el cementerio”.

Otra de las víctimas de la encarnizada persecución de este gobierno delató el entrevistado, es la empleada Romina Navarro quien había saludado por las redes al ex intendente en el día de su cumpleaños, por meses solo hecho, sin tenerse en cuenta su formación educativa (profesora del primer nivel educativo) como una burla la mandaron a la cocina a lavar pocillos y servir café a la cúpula gobernante.

Otros agregaron “No hay nadie quien ponga freno a los abusos, al extremo de que si vemos venir por la vereda a un ex funcionario o dirigente opositor, tenemos que evitar saludarlo, porque si la noticia llega a la municipalidad, comienzan la persecución y nadie en su trabajo quiere tener problemas, indicaron. 

Área de Higiene

Por otra parte en la sección de higiene del municipio, explicaron que  estuvieron largos meses trabajando desprovistos de la indumentaria de seguridad y que por los reclamos del gremio de ATE, y las publicaciones de la prensa, recién el viernes último hicieron entrega de prendas de trabajo y que aún resta se les entregue el calzado que es muy importante a la vez que aclararon que no fue para todos, por lo que todavía hay trabajadores sin guantes, sin calzado adecuado y que aún hoy lunes están recolectando la basura, desagotando pozos negros o trabajando en el matadero sin la ropa y el calzado adecuados, a la vez que comentaron que en la semana que pasó, un empleado contratado del área al que identificaron por el apellido de Gómez, por no tener su bota, sufrió un accidente, pisó un vidrio provocándole un profundo corte en la planta de su pies. 

Estos mismos empleados aclararon que las prendas entregadas las debían haber provisto a comienzo del año y no seis meses después. También aseguraron que, “por todo lo que está pasando en el municipio, nos sentimos desprotegidos cuando nos enteramos que la municipalidad dice haber pagado el seguro de las ART, pero cuando el gremio de ATE pide los recibos no lo muestran y si los empleados pedimos las pólizas nos la niegan y si insistimos nos amenazan para finalizar diciendo. Lo del seguro nos preocupa porque si sufrimos algún accidente de trabajo nadie va responder por nosotros.

Carpintería

Nuestros periodistas estuvieron en el galpón donde funciona la Carpintería Municipal. No sólo hacen falta herramientas, barbijos sino que consideramos que las condiciones de precariedad y hacinamiento sin baños, sin agua para higienizarse, ponen en riesgo al trabajador que dicen a veces que tienen que recurrir a realizar sus actos fisiológicos en el edificio en ruinas del ex mercado, habiendo convertido esta gestión al lugar en un viejo depósito, donde las ratas y alimañas han encontrado seguro refugio en pleno centro de la ciudad de Monte Quemado y a solo metros del edificio comunal.

Palacio Municipal

“La situación del empleado municipal de Monte Quemado siempre fue precaria”, dijo un empleado de la administración, quien dio cuenta que en el edificio comunal que “nada tiene de palacio”, se sufre por la falta de ventilación, trabajando en oficinas de espacios reducidos, con un baño único para empleados al que compartimos con el público que concurre al edificio a realizar gestiones, y aclaro que el intendente y los concejales tienen sanitarios privados.

La  exposición de los municipales entrevistados y el incumplimiento de las condiciones mínimas de higiene y seguridad que se observa en las distintas áreas donde desempeñan sus funciones, advierten que en algunas de las áreas trabajan en un ámbito de alto riesgo de insalubridad, inseguridad e inestabilidad laboral por efecto de una persecución política, que degrada y oprime al trabajador municipal.