Se conoce como nepotismo a la predilección exagerada que algunos funcionarios en actividad que ocupan cargos públicos poseen respecto a su familia, allegados y amigos a la hora de realizar concesiones o contratar empleados estatales.

En estos casos, el individuo que accede a un cargo público electivo una vez logrado el objetivo y elige no por mérito propio o capacidad a su parentela colocándolos en puestos claves, desde donde en oportunidades se constituyen en plena democracia las dinastías o gobiernos de familia.

Nepotismo

En los Estados donde rige la meritocracia (un sistema para el cual el mérito justifica el ascenso en el marco de una escala jerárquica), el nepotismo está considerado como un acto de corrupción. No se acepta, a nivel social, que un dirigente político decida destinar recursos públicos a un familiar o amigo por cuestiones de simpatía o afecto y hay antecedentes que hay estados municipales donde se pagan en sueldos más de 150.000 mensuales a los miembros de una misma familia.

Por ejemplo: El intendente de un pueblo nombra a sus hijos como máximos responsables de Secretarías, áreas claves del funcionamiento del Gobierno Municipal y si estas personas elegidas acreditan méritos suficientes para el cargo (formación profesional, antecedentes, etc.), el nepotismo será sólo una suspicacia. En cambio, si estos familiares no tienen trayectoria política o profesional, el caso de nepotismo quedaría confirmado. El pueblo está pagando sueldos a quienes no están capacitados para el cargo.

Historia

El nepotismo tiene una historia milenaria. Se cree que el concepto deriva del griego antiguo nepos (traducido al español como “sobrino”) o del emperador de origen romano Julio Nepote. En la época romana, de hecho, hubo un caso muy famoso de nepotismo, cuando Pompeyo otorgó importantes responsabilidades a su yerno Metelo Escipión (de nula capacidad en el ámbito militar) y fue denunciado por Marco Antonio ante el Senado.

Como decimos, a lo largo de la Historia se han dado muchos casos de nepotismo. Entre los mismos destacaría, por ejemplo, Pisístrato que gobernó Atenas a lo largo del siglo VI a.C y lo hizo mediante una tiranía. El hecho de que tuviera auténtico temor a que se urdieran tramas y planes para acabar con su mandato y su poder hizo que tomara la determinación de ofrecer los máximos cargos políticos a miembros de su familia y a amigos en los que tenía absoluta confianza.

Ya mucho más cerca en el tiempo tuvo lugar un caso de nepotismo muy sonado y fue el que llevó a cabo Napoleón Bonaparte. Así, este líder francés lo que hizo fue apostar por su familia para darle determinados puestos de responsabilidad e importancia. El más conocido de todos ellos fue el que le otorgó a su hermano José Bonaparte, más conocido por Pepe Botella por su afición al alcohol, al que lo encumbró como rey de España.

En la actualidad también nos encontramos con personas que han sido acusadas de nepotismo. Este sería el caso, por ejemplo, del actual gobierno de la municipalidad de Monte Quemado, donde el intendente nombró a sus hijos en dos Secretarías, a su consuegro en Tesorería y se suman otros familiares que perciben sueldos, sin conocerse funciones específicas y habría también proveedores de insumos al municipio, en una situación que si bien es cierto es legal, desde la política se la considera como conductas que afectan a los gobiernos del sistema democrático.