Ayer, los habitantes de la localidad de Nueva Yuchán, departamento Pellegrini, tuvieron una sorpresa cuando vieron ingresar a la isla dos camiones cargados de postes de luz, cables, y todo los que una empresa utiliza para extender desde el interconectado la energía eléctrica, al pueblito donde sobreviven encerrados por un brazo del río Salado.

Las gestiones las había realizado el comisionado de Santo Domingo, Lázaro Orellana, ante el gobierno de Gerardo Zamora, quien siempre da repuestas al interior profundo, que es al que pertenece la población de Nueva Yuchán.

No son muchos los habitantes de esa localidad, aproximadamente 25 a 30 familias, que están allí desde hace varias décadas, pero no figura el lugar en ningún mapa, sin embargo se lo conoce porque todos los años hacen una fiesta para venerar a la virgen de Huachana.

El islote está encerrado por un brazo del río Salado que se desprende, lo abraza y se vuelve a reencauzar, encerrando una superficie de aproximadamente 1.500 hectáreas, Allí, en esa isla, sobrevivían las familias, que hasta hace dos años atrás, para salir, tenían que cruzar un ancho arrollo por un precario puente de ingeniería cacera, que ellos mismos lo habían construido, donde hay mil percances que pueden contar, algunos con humor, y otros de consecuencias graves.

Pero para los habitantes de Nueva Yuchán, todo ha cambiado en estos dos últimos años. La ex gobernadora Claudia Zamora, por gestiones de Orellana mando a construir un puente vehicular, que es por donde ayer, ingresaron los camiones de la empresa que tiene a su cargo la instalación de la red eléctrica que proveerá de energía eléctrica a cada una de las familias. Servicio básico que romperá definitivamente las asimetrías del aislamiento y los ayudará a progresar y desarrollarse como comunidad.