En el marco del programa “Conociendo mi provincia”, allá por el año 2018, alumnos del Agrupamiento N° 86019 de Santo Domingo, Pellegrini, visitaron al gobernador Gerardo Zamora.

En esta oportunidad le pidieron la refacción  y construcción de nuevas aulas del viejo edificio de la Escuela 872 de esta localidad. 

Mientras tanto el Agrupamiento funciona doble turno primer y segundo año en la nueva escuela; y tercer, cuarto y quinto año en el viejo edificio lo que dificulta el control de los alumnos ya que rectoría de los últimos tres años también funcionan por la tarde en la nueva escuela.

El gobernador Gerardo Zamora nunca se olvidó de aquel pedido realizado por los alumnos, lo que finalizado los estudios del suelo y todos los requisitos necesarios para llevar a cabo dicha refacción y construcción, alumnos y profesores festejaron con alegría las obras del colegio secundario tan anhelado.

Juntamente con la empresa que llevaría adelante dicha obra se presentó Recursos Hídricos de la Provincia para dar una solución al derrame de agua de dos pozos cercanos a la obra del nuevo edificio. El día 11 de junio, violando la cuarentena, se presentó Osvaldo Vizgarra (hijo del agente Sanitario Osvaldo Vizgarra) acompañado de ocho personas. Amenazaron a los empleados de la empresa, pidieron que no realicen las obras de refacción, además manifestaron pertenecer a un partido político opuesto al proyecto de Gobierno provincial.

Se aclara que junto a los violentos se encontraba la Sra. Norma Palmas, hija del primer comisionado de Santo Domingo, don Dumy Palma. Los empleados   al verse amenazados y con la incertidumbre de sufrir violencia en terrenos totalmente desconocido, decidieron no arriesgar sus vidas y retirarse del lugar. La institución cuenta con un total de 124 alumnos, los que vieron su sueño bastante distante.

Inmediatamente el jefe de la Seccional 32 puso en conocimiento a la Fiscalía, a lo que ordenó la notificación y la prohibición de acercarse al edificio del Estado.  Los violentos se negaron a firmar la notificación. A todo esto, el comisionado Lázaro Orellana no tiene dudas de quiénes fueron los que  intentaron romper todo el trabajo realizado en los pozos. Hecho que también fue denunciado y puesto en conocimiento a la Fiscalía. 

Cabe señalar que estos personajes son los que no dejan trabajar al Comisionado. Estos personajes son los que no dejan trabajar y crecer a una comunidad.

Pasados unos días, la empresa regresó para continuar con la obra y nuevamente fueron expulsados por éstas personas que por medio del sacerdote, Santiago Garcias Pintos de San José de Boquerón y un funcionario de Nueva Esperanza, enviaron una nota a la ministra de Educación, en la que exigían la presencia de autoridades que explicaran la calidad del suelo.

El día 24 se presentaron autoridades del Consejo General de Educación, autoridades de Arquitectura, técnicos y arquitectos y funcionario del Ministerio de Educación para dar las explicaciones que exigían los violentos.

Cuando terminaron con sus argumentos exigían los bienes del edificio a lo que se les explicó que son del Estado. Después de aceptar la continuidad de  la obra se retiraron. 

 La empresa se presentó a seguir trabajando.

Las fuerzas policiales aseguran la continuidad de la obra de refacción del edificio. CUANDO todo parecía haberse calmado, el sacerdote de El Boquerón se reunió en la casa de su catequista Carmen Ivañez, una tucumana con un vocabulario verborrágico y violento, lo que hizo que el cura se presentara en la obra haciendo oído sordo al pedido de los empleados a no pasar. Pasó y sacó fotos de los trabajos realizados hasta el momento. Estos personajes nocivos para la sociedad deberían ser detenidos y puestos a disposición de la justicia. Porque jamás se ha visto en ningún lugar del mundo gente se opongan a tener un colegio. Cabe aclarar que estás personas son las mismas que no dejan trabajar al comisionado Lázaro Orellana. También es conveniente aclarar que estas personas no tienen hijos en el colegio por lo que está a las claras que sus objetivos es no dejar trabajar.