Nuevo Diario recorrió las estaciones de servicio, donde los usuarios de vehículos de gran porte y de rodados menores se abastecen de combustible por semana y no por el mes.

“Muy pocos, o casi ningún conductor elige llenar el tanque, hace mucho era la posibilidad de hacerlo, para que en 15 días o más no tengan que volver a efectuar una carga de combustible”, comentó Exequiel, expendedor de nafta y gasoil. 
En este contexto, el promedio de un tanque de auto de 47 litros llenarlo costaría unos $ 7.300, el de una camioneta, de un tanque de 80 litros saldría unos $ 18.300.  “En cuanto a los usuarios que tengan motos chicas gastarían unos $ 600 y más grande unos $ 2.000”, comentaron desde una YPF. 
Cabe resaltar que hubo gran coincidencia en que “hay gente que carga 100 pesos en una moto, que no es ni siquiera un litro”, comentaron. Y que “difícilmente alguien llene el tanque de una camioneta o de un auto y si lo hacen, es con tarjeta”, afirmaron.