Zoe, una niña de ocho años, salió a pasear en su bicicleta por inmediaciones de su casa y encontró un perro herido, saliendo de una zona montuosa del barrio El Rosedal de la ciudad de Nueva Esperanza, departamento Pellegrini.

Lo rescató y lo llevó a su casa, donde su hermana Carolina Luna y su madre Graciela advirtieron que tenía fracturada la mandíbula. Aún no se sabe con certeza si el cachorro de unos dos meses de vida fue embestido por un vehículo o sufrió una golpiza que le provocó la grave lesión, penado por la Ley 14.346.
Carolina (21 años) actuó rápidamente para brindarle una oportunidad de vida a la mascota. Contó lo sucedido en el grupo de WhatsApp y recibió aportes económicos para que el animal recibiera atención veterinaria. El cachorro, a quien bautizaron “Salvador”, fue examinado por un profesional en Nueva Esperanza, quien confirmó la fractura y que estaba deshidratado, y sometido a una intervención quirúrgica en La Banda. “Salvador” se recupera en la casa de Carolina, con el cariño y la atención de toda la familia Luna. 
“Queremos agradecer de corazón a todas las personas que colaboraron para que esto sea posible porque entre todos le dimos una oportunidad a este hermoso cachorro”, afirmó Carolina.