Departamento Copo. Ayer se avistó una manga de langostas en las localidades de Nueva Esperanza, EL Puesto, La Virtud y El Salvador, panorama que preocupa a productores de la zona.

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agrolimentaria (Senasa) emitió la primer alerta sobre una invasión de langostas a la Argentina, el 11 de mayo, tras recibir un aviso de su par paraguayo, el organismo informó sobre una manga que volaba con dirección sur hacia la frontera argentina. La semana pasada se las vio en los límites de Santiago y Chaco, hasta que ayer sorprendieron a los habitantes de la zona sur del departamento Copo.

Cuenta el campesino Raúl Ricardo Mansilla de El Salvador, que la manga que pasó era de proporciones importantes, de una magnitud de cuatro a cinco kilómetros, ya que el cielo estuvo cubierto un poco más de una hora y se las veía avanzaron desde el norte hacia el sur.

El Senasa brindó un cuadro de situación de este insecto que no afecta a la salud humana ni de los animales, ya que solo se alimenta de material vegetal. El organismo mantiene acciones coordinadas para su difícil control.

Alertaron que son dos mangas que estarían en territorio argentino. La que fue avistada en el día de ayer está siendo monitoreada por las autoridades sanitarias de los organismos oficiales desde que ingreso al país y se estableció que esta manga conocida como langostas sudamericanas son las que ingresaron por Formosa el 18 de junio pasado, se ha desplazado más de 1000 km desde Paraguay y ayer ingresaron desde Chaco, pasando por el departamento Copo, en cercanías de la ciudad de Pampa de los Guanacos.

Sin límites ni fronteras

La langosta es una plaga migratoria que no reconoce límites ni fronteras y, puede, en un día, trasladarse hasta 150 kilómetros y cruzar de una provincia a otra, o incluso de un país a otro en muy pocas horas.

Puede afectar a la actividad agrícola en forma directa y a la actividad ganadera de forma indirecta, alimentándose de los recursos forrajeros y producir daños, también, en la vegetación nativa.

Para el manejo de la plaga, es necesario un abordaje interinstitucional, público-privado. Por ello, las acciones son definidas por el Programa Nacional de Langostas y Tucuras del Senasa, con los gobiernos provinciales y el sector privado en el marco del Comité Nacional de Crisis.

De difícil control

Frente a la actual contingencia y en el marco de la emergencia fitosanitaria vigente, el Senasa se encuentra coordinando las tareas de monitoreo constante, seguimiento de la manga y definición de momentos oportunos de control, que resulta muy complejo por varios factores.

Sumado a su gran capacidad de vuelo, el rango de tiempo en los que se pueden ejecutar los tratamientos es muy breve y suele darse en lugares de difícil acceso. Las mangas se desplazan durante todo el día y se asientan hacia la tarde noche, ya con poca visibilidad.

Evaluar impactos

Es importante destacar, que para realizar los controles, se evalúa minuciosamente el impacto que pueden tener los mismos en la zona y se realiza previamente un relevamiento de la existencia de población, cursos de agua, colmenas, etcétera.

Trabajo interdisciplinario

Una manga de langostas tiene un control tan complejo como necesario. En estos momentos se está trabajando articuladamente entre el Senasa y organismos del Ministerio de la Producción de Santiago del Estero con el acompañamiento del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Los equipos interdisciplinarios están trabajando en el territorio y con contacto permanente con los productores. Al momento no se han registrado daños en cultivos en la provincia. Si bien los controles contribuyen a disminuir la cantidad de langostas, el nivel poblacional sigue siendo alto. Por ello, es fundamental que los productores monitoreen sus campos para detectar la presencia de la plaga, realicen los controles correspondientes respetando la normativa vigente y den aviso al Senasa.

"Las condiciones climáticas actuales impiden que podamos combatir esta gran extensión de manga de langostas que está pasando por nuestro territorio santiagueño, aunque hasta el momento no tenemos reportes de daños en las siembras", dijo a Télam el ingeniero agrónomo Omar Puig, de la agencia de extensión rural del INTA Bandera.

"Esta mañana una manga de langosta, que es muy peligrosa ya que es muy grande porque tiene como 20 kilómetros de ancho, estaba por la Ruta Nacional 34, entre las ciudades de Casares y Pinto, al sur de Santiago del Estero", detalló el ingeniero Puig.

En ese sentido dijo que "hasta el momento esta manga no se detuvo a comer, ya que el viento y el intenso calor hace que las langostas sigan volando y no se detengan" y agregó que “por estas condiciones se están trasladando hacia el sudoeste, para lo que es el departamento Quebrachos o Salavina y si continúan así seguirán para el norte de Córdoba".

"Esta manga ingresó a Santiago del Estero el lunes y desde la Dirección de Agricultura y Ganadería de Santiago del Estero, también se encuentran realizando seguimiento y control de estas langostas que son de la especie Schistocerca cancellata de países vecinos", detalló y agregó que se moviliza de norte-sur favorecido por la dirección norte del viento y temperaturas superiores a 30 °C, lo que favorece su avance a una velocidad aproximada de 100 kilómetros por día.

"Nuestra preocupación es porque ya llegó a los departamentos Belgrano y General Taboada, que es donde se alberga casi 180 mil hectáreas sembrada con trigo, que está en estado vegetativo y que es una fuente de alimentación que según los aportes de los técnicos del Servicio Nacional de Sanidad Agroalimentaria (Senasa), la plaga necesita en estos momentos para continuar su ciclo de vida", puntualizó.

En ese sentido, detalló que aún no se conocen que haya daños o se hayan detenido en algún campo a "comer" y es por este riesgo es que piden a los productores estar atentos y en caso de detectar la presencia de langosta realizar la correspondiente denuncia al Senasa, a la línea telefónica 0800-999-2386.