Integrantes del Centro de Industriales Panaderos del Chaco se reunieron en la mañana de este jueves para analizar cómo impacta en el sector la inestabilidad cambiaria.

En concreto, los comerciantes señalan que por los vaivenes del dólar el precio de la harina, principal insumo, aumentó de forma sideral o directamente los molinos se niegan a entregar la mercadería. “La idea es que el Gobierno realice un aporte para establecer un precio razonable”, señalaba Diego Ballesta, presidente de la asociación. 

En los últimos días la bolsa de harina se cotiza entre 1100 y 1200 pesos la bolsa, lo que representa un 20% respecto de los últimos días. “Queremos definir un precio que garantice estabilidad y calidad, en el Gran Resistencia varían entre 50 y 85 pesos el kilo, para poder garantizar este componente importante de la canasta básica”, dijo el gobernador, Domingo Peppo.

En contrapartida, los panaderos analizarán en los próximos días la propuesta y señalan que la iniciativa del Ejecutivo es tratar de mantener el precio que regía antes de la corrida cambiaria, que de aplicarse al consumidor final llevaría a que el kilo cotice entre 70 y 90 pesos, publica Diario Norte.