Un pequeño productor de la ciudad de Nueva Esperanzadepartamento Pellegrini— denunció que fue estafado en 700.000 mil pesos, por una venta de un cargamento de carbón vegetal.

Las averiguaciones son llevadas a cabo por el personal de la Comisaría Comunitaria 32 de Nueva Esperanza y la Fiscalía de turno de la circunscripción Capital iniciaron, a partir de la denuncia realizada en la jornada del lunes por un productor de apellido Bernal, de 53 años.
El damnificado, residente en el barrio Las Lomas de la mencionada ciudad, se dedica a la comercialización de carbón vegetal. De acuerdo con lo manifestado a los uniformados, el 13 de julio del corriente año, habría sido contactado por un sujeto de apellido Villalba, oriundo de Buenos Aires, señala Nuevo Diario.
Luego de mantener varias charlas, habrían llegado a la negociación de la venta de un cargamento de carbón. La mercadería estaba valuada en más de 700 mil pesos. El dinero, de acuerdo con lo manifestado por Villalba, iba a ser abonado de inmediato a Bernal, a través de un movimiento bancario que “realizaría luego de llegar al acuerdo”.
Confiado de que se realizaría la transacción económica, Bernal habría enviado a su cliente el cargamento. El carbón habría llegado en tiempo y forma a su comprador, pero con el paso del tiempo, el pago no fue abonado.
Ante la situación, Bernal intentó comunicarse en reiteras oportunidades por teléfono con Villalba. Pero no tuvo respuesta. En primera instancia, el denunciado le cortaba la llamada y luego le realizaba el desvío de la comunicación hacia el contestador.
Luego de haber intentado cobrar su dinero y con respuestas negativas, el pequeño productor decidió recurrir a la Policía para obtener una solución.
De inmediato, se dio intervención en el hecho a los efectivos de la División Delitos Económicos, quienes iniciaron las averiguaciones pertinentes sobre los pormenores del hecho.
Por disposición de la Fiscalía, se tomará declaración testimonial al damnificado, mientras comenzaron a realizar las pesquisas y se corroborará las transacciones realizadas por el damnificado y su ocasional cliente, quien no le abonó hasta el momento la compra.